El actor belga Jean-Claude Van Damme tiene su propia estatua. La obra fue encargada por el propietario de un shopping de Bruselas como festejo por los 40 años del centro comercial. Van Damme, con una trayectoria salpicada de logros profesionales y adicciones, hoy es admirado y respetado por sus compatriotas.
El padre de la criatura
La obra se llama “Músculos desde Bruselas” y en el acto de inauguración asistirá la Ministro de Cultura belga, Fadila Laanan. Fue descubierta el 21 de octubre por el propio actor, que fue el más votado en una encuesta realizada entre los clientes del shopping para determinar a qué belga famoso les gustaría ver en una estatua.
¿Un mérito al más musculoso?
Van Damme empezó a los 10 años a practicar artes marciales. Hasta consiguó el cinturón negro en karate. Ya de adolescente, inició un entrenamiento con pesas que lo llevaría a obtener a los 18 el título de Mr. Bélgica. Años más tarde, muchos lo empezarían a llamar “Los músculos de Bruselas”.
Aunque su éxito más grande se dio en la década de los ‘80, con films como “Contacto Sangriento”, Van Damme nunca dejó de entrenarse para seguir apareciendo en la gran pantalla. De hecho, en 2012 se estrenó “The expendables” donde todavía pueden apreciarse sus brazos forzudos y su abdomen que parece la clásica tabla de lavar.
El de carne y hueso
La escultura fue realizada en bronce, mide 1.74 metros y pesa una tonelada y media. Estará emplazada en la parte exterior del centro comercial, sobre la avenida Sylvain Dupuislaan. El actor, cuyo nombre real es Jean-Claude Van Vaerenberg, nació en 1960 en el municipio de Sint-Agatha Berchem, en Bruselas. Según dijo el famoso luchador, ver la estatua lo dejó literalmente “sin palabras”.
La pose del campeón
Van Damme adopta desde el bronce la pose clásica de su película "El Luchador". Si bien abordó varios tipos de disciplinas deportivas, las artes marciales parecen ser sus preferidas y las que más rédito le dieron a su carrera.
Actor de acción, se busca
Van Damme también aprendió taekwondo y luego incursionó en el kick boxing. Para aprovechar su impresionante físico, decidió probar suerte en Los Angeles como actor de películas de acción. El atleta mide 1,78 metros (5’9”) y está lleno de músculos, pero sin un volumen exagerado.
Van Damme ¿bailarín?
Durante 5 años tomó clases de ballet, y le dio muchísima flexibilidad. El dice que es un arte, y aunque suene raro, también un deporte muy duro. “Si puedes sobrevivir a un entrenamiento de ballet, puedes sobrevivir a un entrenamiento de cualquier otro deporte”, declaró.
No todo lo que reluce...
En 1995, el actor enfrentó problemas con la cocaína. Al año siguiente se internó en un programa de rehabilitación, pero sólo duró una semana. Según dicen, ese año llegó a gastar hasta 40 mil dólares al mes en cocaína. A fines de 1997, su esposa le pidió el divorcio y lo acusó de abuso y adicción a las drogas. Hoy ya parece tener un matrimonio feliz.
En 1998, después de actuar en “Knock off”, Van Damme fue diagnosticado de desorden bipolar y llegó a tener varios intentos suicidas, pero gracias a un tratamiento con valproato de sodio, logró estabilizarse. Un año después, la policía lo arrestó por conducir ebrio, y lo sentenciaron a tres años de libertad condicional.
Algo más que puños y patadas
Es uno de los íconos del cine de acción y las artes marciales de la década del ’90. Sus películas más renombradas son: Contacto Sangriento, Kickboxer, Lionheart, El luchador, y Soldado universal. Siempre estuvo rodeado de bellezas, como Kylie Minogue, y se casó cinco veces, dos con la misma mujer.
Después de idas y vueltas, lo logró
En la actualidad, Van Damme asegura que todos sus problemas de adicciones quedaron atrás. Y que lo logró solo, sin ayuda de terapias ni de centros de rehabilitación. Es sabido que “el deporte es salud”, y a él, el ejercicio lo ayudó a salir adelante, y sigue entrenado día a día como hizo toda su vida.
Los expertos aconsejan el consumo de proteínas para lograr la musculatura como la de Van Damme. Los alimentos de origen animal, carne, pollo, pescado, lácteos y huevos son los que más favorecen su desarrollo. También las legumbres como los porotos de soja, garbanzos y lentejas.
La dieta del campeón
Las carnes deben ser magras, el pollo sin piel y los lácteos preferentemente descremados. Los carbohidratos también son necesarios: pan y pastas de cereales enteros, arroz integral y abundante consumo de frutas y verduras. Evita las harinas blancas y el azúcar refinado.
Come, como Van Damme, varias veces al día, sano y variado, en un equilibrio entre proteínas, carbohidratos y fibra. Y no debe faltar el entrenamiento físico, como mínimo cuatro veces a la semana para ver cambios en tu físico que te aseguren un pasaporte a los sets de filmación. O cuando menos, una estatua en algún centro comercial cercano.