A pesar de ser prevenible, en los últimos años la diabetes tipo 2 mostró un importante aumento en el número de casos junto a una mayor probabilidad de mortalidad entre sus pacientes. Por este motivo, muchos especialistas aseguran que parece actuar como una enfermedad epidémica. Aquí te contamos todo sobre esta ella y cómo puedes hacer para evitarla.
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El páncreas, que ayuda a en la digestión, produce diferentes hormonas, como la insulina, que contribuyen a la regulación de los niveles de azúcar en sangre. Cuando estos niveles son muy elevados, por una escasa producción de estas hormonas o un mal funcionamiento de ellas, se produce la diabetes.
Cuando la insulina no es suficiente o no funciona adecuadamente (lo que ocurre en las diabetes tipo 1 y 2 respectivamente), la glucosa permanece en la sangre y puede causarnos graves problemas, como daños en la visión, nervios, riñones, corazón, cerebro e incluso amputaciones.
Los síntomas de la diabetes tipo 2 pueden aparecer lentamente, muchas veces, pasando hasta desapercibidos. Generalmente, se destacan: micción frecuente, perder peso, visión borrosa, tardar en sanar las heridas, sentirse cansado o con hambre, o tener mucha sed. Sin embargo, la mejor manera de saber si tienes diabetes es mediante un examen de sangre.
Existen diferentes factores que puede aumentar el riesgo de diabetes tipo 2: tener prediabetes (niveles de azúcar en sangre más altos de lo normal), sobrepeso u obesidad, más de 45 años, antecedentes familiares, altos niveles de presión arterial o triglicéridos, depresión, o ser sedentario. Aquí te mostramos consejos para evitar esta enfermedad:
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Perder peso
El sobrepeso, especialmente cuando se distribuye en la zona abdominal, aumenta el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2. Los especialistas hacen hincapié en la importancia de perder en torno al 5 y 10% del peso en estas situaciones, no recuperarlo y mantenerlo a largo plazo. Esto también puede proveer protección contra otro tipo de problemas o trastornos para la salud.
El ejercicio aumenta el consumo de glucosa por parte del organismo, a la vez que estimula las fibras musculares, favoreciendo el transporte de azúcar al interior de las células. Los profesionales aconsejan caminar rápido, andar en bicicleta, o nadar, ya que son las actividades que se han vinculado con un mayor carácter preventivo de la diabetes tipo 2.
Si bien cualquier tipo de movimiento suma al momento de prevenir, los mayores beneficios se vieron en actividades de intensidad moderada. Sin embargo, se advierte que las personas sedentarias o con sobrepeso que deseen comenzar a hacer ejercicio, comiencen de menor a mayor intensidad, para evitar complicaciones. También se recomienda cautela con los ejercicios de impacto.
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Incorporar una dieta equilibrada
Los expertos aconsejan cuidar nuestra alimentación para prevenir la diabetes tipo 2. Una buena forma de hacerlo es disminuyendo el consumo calórico, a partir de reducir la ingesta de grasas y alimentos proteicos. Puedes optar por frijoles, hortalizas, cítricos, bayas, tomates, pescado, granos enteros, leche y vegetales de hoja verde. Además, el agua debe ser una parte fundamental de las comidas.
Una dieta saludable y equilibrada también se consigue limitando o restringiendo ciertos tipos de alimentos. En este grupo, los médicos destacan a los edulcorantes artificiales, miel, comida frita, azucarada y procesada, pan blanco, o fruta muy madura, entre otros.
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Consultar al médico
Todos estos consejos resultan útiles para mantener alejada a la diabetes tipo 2, sin embargo, una buena forma de controlarla y conocer tus niveles de azúcar es visitando regularmente al médico. Él podrá determinar cuál es el riesgo, y si hay algo más que puedas hacer para retrasar o prevenir esta enfermedad, como, por ejemplo, tomar ciertos medicamentos.
Fuentes consultadas:
Asociación Estadounidense de Diabetes, Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales.
