Como de peluquería, pero en casa

El cuero cabelludo es una parte de tu piel, y como tal, requiere sus cuidados. Como toda parte de la piel, los folículos capilares están influenciados por una buena irrigación sanguínea y la salud del resto del cuerpo. Aquí te presentamos una serie de consejos para mantener saludable el cuero cabelludo.

Los alcoholes grasos, identificados con nombres químicos en inglés como cetyl, misteryl, stearyl son buenos hidrantantes del cuero cabelludo. Existen también alcoholes secantes como el ethanol, propanol, isopropyl que deberían ser evitados en los productos para el cabello ya que producen mucha sequedad en el cuero cabelludo.

Cómo te laves tu cabello y los productos que utilices son clave para tener un pelo brillante y sedoso, recomiendan expertos de la Asociación Americana de Dematólogos (AAD). Cualquier ingrediente que seque mucho el cuero cabelludo o produzca picazón en la cabeza debería ser evitado.

Si tienes cabello graso deberás lavarlo en forma más frecuente, al menos una vez al día, depende de la cantidad de aceite que produzca tu cabello, recomiendan los expertos. Si tu cabello está tratado químicamente, puede que esté más bien seco y necesitarás lavarlo menos para evitar que se seque aún más.

Si tu cabello tiene escamas es probable que no lo estés lavando lo suficiente, advierten expertos de la ADD. Esto puede llevar a tener caspa, que es una descamación del cuero cabelludo producida por tener el cabello muy graso, estrés, alergias u hongos.

Es importante concentrar el shampoo en el cuero cabelludo y lavar primero toda la superficie de piel que cubre la cabeza y luego el largo del cabello. Si lavas sólo el cabello y descuidas el cuero cabelludo tu cabello puede empezar a lucir volátil, opaco y grueso, explican expertos de la AAD.

Al masajear el cuero cabelludo se estimula la circulación de sangre, lo cual ayuda al crecimiento y fortalecimiento de los folículos capilares. Después de aplicar el shampoo, acostúmbrate a masajear el cuero cabelludo con la yema de tus dedos durante unos 30 segundos.

En este caso, considera un prelavado con aceites nutritivos, elige un aceite con antioxidantes, naturalmente antibacterial o aceite de lavanda. Antes de lavarse con shampoo, puedes colocarte unas locas de algún aceite capilar del cuero cabelludo, masajéalo suavemente con la yema de tus dedos y después procede naturalmente con el shampoo.

Utiliza acondicionador cada vez que uses shampoo, que te ayuda a mejorar el aspecto del cabello dañado y aumentar el brillo, disminuye la estática eléctrica, mejora la fuerza del cabello y te brinda protección de los rayos ultravioletas. Coloca el acondicionador en las puntas del cabello y no en el cuero cabelludo.

Es importante proteger el cabello de los efectos dañinos del cloro y del sol. Para esto, coloca un protector capilar y ponte un sombrero o gorro de baño antes de ir a nadar o de exponerte al sol. Visita al dermatólogo que te revise el cuero cabelludo en busca de lunares o manchas irregulares.

Un cepillo puede hacerle más daño a tu cabello que un secador de pelo utilizado en forma incorrecta y demasiado vigorosa. Elige un cepillo fabricado con plástico suave, ya que el plástico suaviza el cabello y lo protege mucho más que las cerdas naturales y artificiales.

Es normal perder algo de cabello, unos 100 por día, informa la Biblioteca Nacional de Medicina. Sin embargo, muchos hombres y algunas mujeres, pierden demasiado cabello y empiezan a preocuparse. Una de las causas comunes de la pérdida de cabello es la sequedad o deshidratación.

La buena hidratación de todo el cuerpo mejora el aspecto de tu cabello así como el comer alimentos ricos en proteínas y vitaminas A y E. Para hidratar el cabello seco también puedes utilizar un serum o crema para peinar que minimizará los efectos nocivos del peinado y del secador de pelo.