La enfermedad cardiovascular es un término que se utiliza para referenciar a distintos problemas del corazón. Estos, a menudo, se deben a la aterosclerosis, la acumulación de grasa y colesterol en las paredes de los vasos sanguíneos. Para evitar este problema es necesario llevar una dieta saludable, que además de incluir opciones sanas, implica eliminar otras dañinas.
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La enfermedad cardiovascular es un conjunto de trastornos del corazón y de los vasos sanguíneos, como las cardiopatías, enfermedades cerebrovasculares, hipertensión, insuficiencias cardíacas, o miocardiopatías. Según señalan las autoridades sanitarias, es la principal causa de defunción en todo el mundo.
Existen muchos factores de riesgo para la enfermedad cardiovascular. Entre los principales se encuentran el sobrepeso u obesidad, diabetes, estrés, consumo excesivo de alcohol, tabaquismo y sedentarismo. Otro aspecto clave es la dieta. Evita estos alimentos para mejorar la salud de tu corazón:
Hamburguesas
Para colaborar con una óptima salud cardíaca, se estima que la dieta de un adulto debe sumar a lo largo del día no más de 2.000 calorías, menos de 1.500 mg de sodio, menos de 16 g de grasas saturadas y unos 300 mg de colesterol. Sin embargo, cualquier hamburguesa que obtienes en locales de comida rápida podría triplicar esos números.
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Bacon o tocino
Para muchos el tocino es un ingrediente fundamental del desayuno. Es la grasa que se encuentra entre el cuero y la carne del cerdo, por lo que es colesterol puro. Media libra está compuesta en un 84% por grasa, posee más de 1.000 calorías y muchísima sal. Como si fuera poco, es un alimento con una baja calidad nutritiva. En esta categoría también se pueden incluir otros embutidos.
Las comidas étnicas de restaurantes, hispanas, indias, pero especialmente asiáticas, esconden un peligroso contenido de sal, que aumenta el riesgo de enfermedad cardiovascular ya que favorece la aparición de hipertensión. Por eso, el consejo de los especialistas es hacerlas en casa, o elegir los vegetales y condimentos, y determinar la cantidad.
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Sándwiches
Los sándwiches preparados en cadenas de comida rápida o supermercados suelen tener demasiado fiambre. Y, como señalamos, los embutidos son la peor opción para el corazón, ya que están conformados por pura grasa y sal. Una opción para evitar este riesgo es elegir opciones libres de fiambre o que tengan pollo, pero que los ingredientes principales sean los vegetales.
Donuts
El problema con las donuts no es sólo su gran aporte calórico, sino que tienen un alto contenido de grasas "trans", que son perjudiciales para el buen flujo sanguíneo. Otro aspecto importante es la gran cantidad de azucares agregados que contienen, que, entre otras cosas, aumentan la probabilidad de diabetes, otro factor de riesgo para la enfermedad cardiovascular.
Salad bar de mercados
Recurrir a las comidas preparadas que ofrecen los supermercados, por más que se muestren como opciones saludables, puede ser un error, según informan los expertos. Esto se debe a que suelen tener un contenido de sal muy alto y muchas veces las opciones no saludables están "camufladas". En este caso, los cardiólogos aconsejan elegir vegetales, pero no agregar aderezos.
Bebidas dulces
Los refrescos, jugos de fruta comerciales e incluso las bebidas dietéticas tienen un lado oscuro. Muchos investigadores han analizado su composición, hallando que poseen sustancias que, a la larga, pueden aumentar el riesgo de diabetes, obesidad e incluso daño intestinal. Prueba preparar tus propios jugos, mezclando tus frutas favoritas. El azúcar que estas brindan será más que suficiente.
Al igual que las donuts, las papas fritas de cadenas de comidas rápidas o restaurantes tienen muchas grasas "trans", que dificultan una correcta circulación sanguínea. Además, otra vez aparece una de las principales enemigas del corazón: la sal. Una porción mediana de papas fritas puede contener hasta 1.200 mg. de sodio (casi todo el consumo diario recomendado).
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Dulces
Aunque durante años se creyó que el principal enemigo del corazón eran las grasas, muchos expertos advierten que la mira debería ponerse en otra amenaza: el azúcar. Las dietas altas en azúcar agregada (que fácilmente podemos hallar en galletas, pasteles, dulces o cereales) pueden contribuir a la obesidad, inflamación, colesterol alto y diabetes, factores de riesgo para las enfermedades cardíacas.
Pizzas
Muchas veces pueden pasar desapercibidas, pero las pizzas de cadenas de comida rápida o restaurantes contienen mucho sodio, así como grasa saturada, que aumenta a medida que se acumula queso adicional y coberturas, especialmente a base de carnes o embutidos. Para prevenir posibles daños, al comer fuera intenta limitar a una o dos rebanadas, y optar por coberturas vegetales.
Fuentes consultadas:
Asociación Estadounidense del Corazón (AHA), Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), Organización Mundial de la Salud (OMS).