Quema grasa, acelera el metabolismo, desintoxica el cuerpo, estimula el sistema inmunológico, ajusta el PH, ayuda a la digestión, éstos son algunos de los beneficios promovidos por los "fanáticos" de beber agua tibia con limón en ayunas. Pero, ¿qué hay de cierto detrás de estos mágicos atributos?
Las propiedades del limón
Todos los cítricos son valiosos y ricos en vitamina C, pero el limón es el que ofrece más beneficios porque suma otras cualidades en nutrientes. Tiene bajo contenido energético, y suma a su nivel equilibrado en sodio y potasio a su alto valor en vitamina C.
Mito 1: El agua tibia adelgaza
Es verdad que nuestro cuerpo gasta calorías para mantenernos a una cierta temperatura, pero beber agua fría o caliente no influye para adelgazar. Se recomienda agua tibia porque se absorbe más rápidamente por el cuerpo.
Mito 2: Desintoxica el cuerpo
Un estudio de la Universidad de Ottawa demostró que tomar una bebida caliente en un ambiente caluroso puede hacerte sudar para compensar el calor. Al sudar se eliminan toxinas. Pero todo dependerá del clima, así que independientemente de la temperatura, beber agua es un hábito recomendable.
Mito 3: Hay que beber en ayunas
Michel Boschmann, experto de la Universidad de Medicina Charité de Berlín, demostró en un estudio que consumir dos vasos de agua en ayunas puede estimular el aparato digestivo y nervioso contribuyendo a un mejor rendimiento físico y mental.
Una onza de jugo de limón aporta el 15% de vitamina C y el 2% de potasio que necesita un adulto al día. Además contiene limonoides compuestos funcionales con propiedades para bajar el colesterol y antitumorales.
Mito 5: Quema grasas
La ciencia ha demostrado que es verdad: un estudio publicado en la revista de Bioquímica, Clínica y Nutrición en el 2008 encontró que los componentes funcionales del limón pueden suprimir de manera significativa el aumento de peso, la acumulación de depósitos de grasa y el exceso de colesterol en la sangre.
El agua tibia con limón puede, definitivamente, ayudar al proceso de la digestión. La acidez del limón estimula la producción de ácidos en el estómago y la secreción de bilis que contribuyen a mejorar la absorción de los alimentos en especial de las grasas.
Un estudio realizado por la Universidad Charité de Berlín (Alemania), publicado en “The American Journal of Clinical Nutrition”, demostró que quien agregó a su dieta beber en ayunas un litro de agua, cada día, logró perder 2 kilos más. Claro que este beneficio no incluye al limón ni al agua tibial.
Conclusión
Para la mayoría de los nutricionistas, los beneficios del consumo de agua tibia con limón son un poco exagerados. No obstante, puede tener algunos méritos siempre y cuando se acompañe de una dieta equilibrada y la práctica de ejercicio. No es un remedio mágico, pero a nadie le viene mal tomar un vaso extra de agua al día.