Los investigadores hallaron que el esperma de los hombres con un peso normal y el de los hombres obesos diferían en el modo en que los genes se activaban o se desactivaban. Y las diferencias se observaron en regiones genéticas asociadas con el desarrollo del cerebro y el control del apetito.
Los científicos daneses afirmaron que los hallazgos podrían ofrecer una explicación biológica de por qué los papás con mucho peso a menudo tienen hijos con mucho peso.
"A un nivel básico, la mayoría de las personas saben que los padres con sobrepeso con frecuencia tienen hijos con sobrepeso", señaló Anthony Comuzzie, vocero de la Sociedad de la Obesidad (Obesity Society) e investigador en el Instituto de Investigación Biomédica de Texas, en San Antonio.
"Eso no se debe del todo a la genética, por supuesto, pero una buena parte sí", comentó Comuzzie, que no participó en el nuevo estudio.
Pero añadió que el asunto podría ser más complicado que simplemente el grupo de genes que se heredan. El presente estudio se centró en la "epigenética", que son los mecanismos químicos que determinan si un gen está activo o inactivo en ciertos momentos.
La investigación ha mostrado que los patrones epigenéticos pueden alterarse a través de la conducta, incluyendo la dieta y el ejercicio. Y al igual que los genes, los patrones epigenéticos se pueden heredar.
Los científicos solamente están empezando a comprender cómo funciona, pero la investigación con insectos y roedores muestra que las "marcas" epigenéticas parentales pueden afectar a la salud de sus hijos.
Todo esto sugiere que heredamos algo más que una "mezcla aleatoria de genes de nuestros antepasados", dijo el investigador principal, Romain Barres, profesor asociado de la Universidad de Copenhague, en Dinamarca.
En lugar de eso, dijo, las personas quizá reciban "una impronta biológica de la conducta y el estilo de vida [de sus padres]".
Para realizar el estudio, publicado en línea el 3 de diciembre en la revista Cell Metabolism, Barres y sus colaboradores analizaron el esperma de 10 hombres obesos y de 13 hombres con un peso normal. Los investigadores hallaron que los dos grupos mostraron unos patrones de metilación del ADN distintos en su esperma, incluso en regiones genéticas asociadas al control del apetito.
Comuzzie lo explicó de la siguiente forma: "Se pueden tener dos genes que son estructuralmente idénticos. Pero no funcionan del mismo modo si tienen patrones de metilación del ADN distintos".
Para ver si la obesidad, por sí misma, podría ser la razón de estas diferencias, los investigadores estudiaron luego a un grupo de hombres con una obesidad severa que se sometieron a una cirugía para perder peso. Hallaron que la reducción de peso tras la cirugía provocó un cambio "dramático" en la metilación del ADN del esperma de los hombres.
"Ese hallazgo es realmente intrigante", dijo Comuzzie.
Pero sigue siendo un gran misterio, añadió, qué es lo que significan los patrones epigenéticos en última instancia para los hijos de los hombres.
"¿Hasta qué punto se trasmiten estos patrones?", se preguntó Comuzzie. "¿El patrón se 'reinicia' en el cigoto [el óvulo fertilizado]? No lo sabemos".
"No hemos investigado a los hijos de los hombres que estudiamos", dijo Barres.
Pero su equipo está trabajando ahora con una clínica de fertilidad para estudiar las diferencias epigenéticas en embriones que no se han usado, creados con el esperma de hombres de varios pesos. (En Dinamarca, las clínicas de fertilidad tienen que descartar los embriones no usados después de 5 años, y se pueden usar para la investigación).
Por ahora, señaló Comuzzie, los hallazgos sugieren que las mujeres no son las únicas que necesitan ser conscientes de su estilo de vida y su salud cuando quedan embarazadas.
"Los papás también cuentan", dijo.
Barres se mostró de acuerdo. "Nuestros resultados podrían ayudar a cambiar la conducta [previa al embarazo] de los futuros papás", dijo.
Más información
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Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com© Derechos de autor 2015, HealthDay