Los cambios fibroquísticos son las afecciones benignas de los senos más comunes. Estos cambios se pueden encontrar en distintas partes del seno, así como en ambos a la vez, y ocurren con mayor frecuencia en la edad fértil de la mujer, aunque también pueden presentarse después de la menopausia en las mujeres que reciben terapia hormonal.
Además de las masas o bultos, los senos fibroquísticos pueden provocar dolor agudo, inflamación y picazón o comezón.
Esta condición es más común de lo que se cree, informa el Colegio Americano de Obstetras y Ginecólogos (ACOG) y con frecuencia los senos duelen antes del período menstrual y los dolores desaparecen cuando finaliza el sangrado.
Cuando se observa el tejido fibroquístico del seno con un microscopio, se pueden hallar muchos cambios. La mayoría de éstos reflejan la forma en que el tejido del seno ha respondido a los cambios hormonales mensuales, y tienen poca importancia.
Las áreas con fibrosis de los senos tienen una consistencia como de hule, firme o dura al tacto, y por tratarse de una condición benigna, no requiere de ningún tratamiento en especial. Sin embargo, para las mujeres que lo padecen, el ACOG brinda unos consejos que pueden aliviar:
- Aplica calor o hielo en el seno (lo que mejor funcione para ti)
- Toma un medicamento antiinflamatorio no esteroide de venta libre, como el ibuprofeno.
- Usa un sostén que se ajuste bien a tus senos.
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