Mutilación genital femenina: cifras que duelen

En Inglaterra y Gales, 137,000 mujeres y niñas son víctimas de la mutilación genital femenina (MGF) con las tasas más altas en Londres, Manchester, Slough, Bristol y Leicester.

Un estudio reciente de City University London y Equality Now, financiado por Trust for London y Home Office, analizó los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas y encontró que en algunos lugares como en Southwark, Londres, 1 de cada 20 mujeres son víctimas de MGF, y 1 de cada 10 dijeron que sus madres habían experimentado la práctica.

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Con las cifras altas de Londres, pero más bajas en otras zonas, la tasa global de MGF en Inglaterra -donde es ilegal desde 1985- ronda el 1,6%.

María Wandia, líder del programa de MGF en Equality Now, dijo: "Esperamos que los responsables políticos a todos los niveles, incluso en las autoridades locales, respondan con urgencia a estas nuevas cifras”. Y agregó: “Esto significa intensificar el trabajo para evitarlo, proteger a las niñas en situación de riesgo, prestar apoyo a las sobrevivientes, perseguir los procesos y desarrollar acciones pertinentes, para asegurarnos de que se ponga fin a esta violación de los derechos humanos”.

Causa daño y viola los derechos de las mujeres

La mutilación genital femenina (MGF) comprende todos los procedimientos que, de forma intencional y por motivos no médicos, alteran o lesionan los órganos genitales femeninos, según definiciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Es una violación de los derechos humanos de las mujeres y niñas que no aporta ningún beneficio a la salud, al contrario, puede producir un gran daño. 

En la actualidad, unas 140 millones de mujeres y niñas sufren las consecuencias de la MGF, y se calcula que en África hay 92 millones de mujeres que han sido objeto de la práctica. En la mayoría de los casos, se practican en la infancia, en algún momento entre la lactancia y los 15 años.

La MGF refleja una desigualdad entre los sexos muy arraigada, y constituye una forma extrema de discriminación de la mujer. Constituye una violación de los derechos del niño y viola los derechos a la salud, la seguridad y la integridad física, el derecho a no ser sometido a torturas y tratos crueles, inhumanos o degradantes, y el derecho a la vida en los casos en que el procedimiento acaba produciendo la muerte, según la UNICEF.

Todas las formas de mutilación genital femenina pueden causar hemorragia y dolor inmediato, y se asocian con riesgos de infección, con las complicaciones obstétricas y con mayor riesgo de muerte perinatal, según la citada fuente. 

Los problemas sexuales son también más comunes en las mujeres que han sido sometidas a MGF: hay una probabilidad 1,5 veces mayor de que sufran de dolor durante las relaciones sexuales y experimenten considerablemente menos satisfacción sexual, y es 2 veces más probable que enfrenten falta de deseo sexual.

MGF en EE.UU.

En 1996 se prohibió la práctica en el país. Según Equality Now, en el año 2000, se calculaba que 227,887 mujeres y niñas estaban en riesgo de sufrir una MGF. La organización no suministra datos actuales sobre la cantidad de mujeres que son víctimas o corren riesgo.

La incidencia, la prevalencia y los efectos de la MGF en determinadas comunidades de EE.UU. están envueltas en un halo de silencio si se compara con algunas naciones europeas. Las estadísticas que existen son especulaciones basadas sobre todo en las poblaciones inmigrantes de comunidades donde se practica la mutilación. 

Aunque sólo se han denunciado un par de casos en Georgia (en 2003 y 2010), los activistas contra la MGF han oído a los miembros de las comunidades hablar sobre chicas americanas que son sometidas a la mutilación, ya sea durante sus vacaciones en el país de sus padres o mediante “practicantes” que llegan a EE.UU. para realizar la operación. según revela Equality Now.

Hay desinformación general sobre cómo tratar el tema de la MGF en las escuelas y en los centros de salud del país. expresa puntualmente la misma organización.

En la actualidad, los siguientes estados cuentan con leyes que protegen a las mujeres y penalizan la MGF: California, Colorado, Delaware, Illinois, Maryland, Minnesota, Missouri, Nevada, New York, Dakota del Norte, Oregón, Rhode Island, Tennessee, Texas, West Virginia y Wisconsin.