Mitos y verdades sobre la endometriosis

La endometriosis es una enfermedad inflamatoria crónica que ocurre cuando un tejido similar al que naturalmente recubre el útero crece fuera de éste.

Se estima que afecta al 10% (190 millones) de las mujeres y niñas en edad reproductiva en todo el mundo. A pesar de su gran incidencia, existen muchas mitos en torno a esta enfermedad que pueden obstaculizar su diagnóstico y tratamiento.

No una cura para la endometriosis, por lo que el objetivo del tratamiento es controlar sus síntomas. | Foto: GETTY IMAGES

Puntos clave

  • La endometriosis es una enfermedad inflamatoria crónica que ocurre cuando un tejido similar al que naturalmente recubre el útero crece fuera de éste.
  • No existe una cura para esta afección, y se estima que afecta al 10% (190 millones) de las mujeres y niñas en edad reproductiva en todo el mundo.
  • Para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuado es importante diferenciar la verdad de mitos o creencias erróneas sobre la endometriosis.

Mito 1: La endometriosis siempre causa dolor

Es común que la endometriosis se asocie a fuertes dolores, especialmente en la zona pélvica. Las estadísticas indican que más del 60% de las mujeres con diagnóstico de endometriosis reportan dolor pélvico crónico, y que tienen hasta 13 veces más probabilidades de tener dolor abdominal en comparación con quienes no tienen esta afección.

Sin embargo, una mujer puede recibir un diagnóstico de endometriosis cuando no experimenta dolor alguno. Los expertos aseguran que, en algunos casos, la persona incluso no sabe que tiene una endometriosis avanzada hasta que se somete a una cirugía.

Mito 2: La endometriosis siempre causa períodos muy abundantes y dolorosos

Nuevamente, nos encontramos ante un síntoma muy común pero no por ello universal. Las autoridades sanitarias afirman que los períodos suelen ser dolorosos con la endometriosis, aunque en muchos casos este malestar puede presentarse en otras áreas, como los intestinos.

Los sangrados también pueden variar en volumen y duración, abarcando desde muy intensos y dolorosos, hasta leves y ligeros. Por ello, lo mejor es hablar con un profesional de la salud para conocer cuál es tu situación.

Mito 3: La endometriosis es sinónimo de infertilidad o cáncer

Aunque se estima que entre 30 y 50% de las mujeres con endometriosis experimentan dificultades para quedar embarazadas, esta afección no es sinónimo de infertilidad.

Existen casos de pacientes con endometriosis grave que quedaron embarazadas, mientras que otras mujeres con endometriosis leve si presentaron problemas. Para saber si existe la posibilidad de quedar embarazada, se lo debe intentar, siempre bajo recomendación y supervisión de un profesional de la salud.

Otro mito común es que la endometriosis es una afección ligada al cáncer, sin embargo, no está probada esa relación.

Mito 4: Los niveles altos de estrógeno causan endometriosis

Los estrógenos son un grupo de hormonas que tienen un rol clave en el desarrollo de las características físicas y las funciones reproductivas femeninas, como el crecimiento de los senos y útero, o la regulación del ciclo menstrual.

No se ha demostrado que los niveles elevados de estrógeno sean la causa de la endometriosis, sin embargo, se suele usar medicamentos que bloquean los estrógenos para ayuda a aliviar los síntomas que causa esta afección.

Mito 5: El aborto causa endometriosis

Muchas veces se afirma que someterse a un aborto puede ser la causa de la endometriosis, sin embargo, los expertos aseguran que esto es un mito que surge debido al debate político y social en torno a esta práctica.

Mito 6: La endometriosis solo afecta a los órganos reproductores femeninos

Respuesta: Es común que las lesiones que provoca la endometriosis se encuentren en la pelvis y la parte inferior del abdomen, pero esto no quiere decir que esa es la única zona del cuerpo que puede verse afectada.

La mayoría de las endometriosis no afectan los órganos reproductivos, sino que se implantan en el interior del abdomen en una superficie llamada peritoneo. También se puede encontrar en otras áreas del organismo, por ejemplo, vagina, cuello del útero, vulva, intestinos, vejiga, recto, e incluso pulmones y cerebro.

Mito 7: Una histerectomía cura la endometriosis

La histerectomía es una operación para extraer el útero, aunque a veces también se pueden extirpar los ovarios y trompas de Falopio.

Aunque se estima que por encima del 80% de las mujeres con endometriosis que se someten a una histerectomía están satisfechas con los resultados después de la cirugía, esto no significa que la endometriosis está curada.

En principio, porque actualmente no existe ninguna cura conocida para la endometriosis. Además, la endometriosis puede reaparecer después de la cirugía o los síntomas pueden continuar si todavía hay lesiones endometriales fuera del útero.

Mito 8: El embarazo cura la endometriosis

No existe una cura para la endometriosis, aunque este mito suele ser muy popular debido a que algunas mujeres ven mejoras en los síntomas durante el embarazo (posiblemente debido a los cambios en los niveles hormonales). Sin embargo, también existen casos en los que estas mejoras no solo no se ven, sino que también se aprecia un empeoramiento de los síntomas.

Mito 9: Tomar píldoras anticonceptivas cura la endometriosis

Las píldoras anticonceptivas no pueden curar la endometriosis, aunque se han registrado casos en los que las mujeres muestran una reducción en los síntomas debido a la supresión de la ovulación y la menstruación.

Otros medicamentos que pueden ayudar a aliviar los síntomas de la endometriosis son los analgésicos, como celecoxib (Celebrex), diclofenaco (Voltaren) o indometacina (Indocin).

Importante: no debes tomar ningún medicamento para aliviar los síntomas de la endometriosis a menos que lo recomiende un profesional de la salud.

Mito 10: La menopausia detiene la endometriosis

Aunque es una creencia muy antigua, la menopausia no detiene necesariamente la endometriosis. Los investigadores estiman que existen entre 2 y 5% de mujeres con endometriosis posmenopáusica.

Para recordar:

Hasta contar con evidencia científica significativa proveniente de ensayos en humanos, las personas interesadas en utilizar terapias a base de hierbas y suplementos deben tener mucho cuidado.

No abandones ni modifiques tus medicamentos o tratamientos, antes habla con el doctor sobre los potenciales efectos de las terapias alternativas o complementarias.

Recuerda, las propiedades medicinales de las hierbas y suplementos también pueden interactuar con los fármacos recetados, con otras hierbas y suplementos, e incluso alterar tu dieta.

Fuentes consultadas: Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo, endometriosisUK.org, Organización Mundial de la Salud, WomenHealth.gov.