Si crees que los dientes son lo único que debes cuidar en tu boca, piénsalo dos veces. La boca es un lugar en donde pueden crecer muy fácilmente las bacterias y enfermar nuestras encías. Prevenirlo depende del cuidado diario de tu boca. Aprende aquí cómo hacerlo.
La encía es un tejido suave que recubre la base de los dientes y funciona como un sello para que éstos resistan la fricción de la comida cuando masticas. Una encía saludable debería tener un aspecto de color rosado, debe estar firme, suave y sin inflamación.
Las bacterias de la boca pueden combinarse con la mucosa y partículas de comida, formando una placa de bacterias alrededor de los dientes. Si esta placa no se limpia, puede endurecerse y formar un sarro que no se elimina con cepillarse los dientes. Si este sarro permanece en los dientes, puede causar inflamación en las encías que rodean los dientes, enrojeciéndolas y provocando sangrado. En el peor de los casos, esta inflamación podría provocar la pérdida de piezas dentales.
Existen varios factores que pueden contribuir a que esta infección sea más grave. Las personas que padecen de diabetes y no siguen un tratamiento adecuado podrían tener mayor riesgo, además de las personas fumadoras. Los anticonceptivos orales y el embarazo también podrían aumentar tu riesgo. Sin embargo, la falta de higiene y de visitas regulares al odontólogo son las principales razones para esta enfermedad.
Hay varias cuidados que debes tener para mantener tus encías en óptima condición:
- Cepíllate los dientes por lo menos dos veces al día, con una pasta dental que contenga fluoruro. El fluoruro ayudará a fortalecer el esmalte de tus dientes.
- Al cepillarte, desliza el cepillo en dirección vertical para evitar lastimar las encías. Utiliza un cepillo de dientes de tamaño adecuado para permitir que llegue a los lugares más estrechos de tu boca y asegúrate de que sus cerdas sean suaves.
- Para limpiarte dientes correctamente no es necesario cepillarlos fuertemente. Tus encías son un tejido delicado que puede dañarse si tu cepillada es muy agresiva.
- Utiliza la seda dental todos los días.
- Visita a tu odontólogo con regularidad. Cepillarte los dientes y utilizar la seda dental diariamente podría no ser suficiente para remover totalmente la placa, por lo que tu odontólogo lo podrá hacer con una limpieza regular.
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Si consumes una dieta sana y balanceada, tus dientes y encías, al igual que todos los órganos en tu cuerpo, funcionarán adecuadamente. Antioxidantes encontrados en las frutas y los vegetales, como las vitaminas A, C y E contribuyen a una buena cicatrización de los tejidos. El calcio y la vitamina D encontrada en los productos lácteos te ayudarán a mantener una buena salud de tus huesos, especialmente los que sostienen la base de tus dientes.
- Evita las sodas, ya que éstas contienen sustancias que dañan el esmalte de tus dientes y afectan la salud de tus encías.
- Evita fumar. El tabaco es uno de los factores de riesgo más importantes para sufrir enfermedad en las encías. Éste favorece la formación de placa alrededor de los dientes y contribuye a la inflamación de las encías. Además podría contribuir a la pérdida de hueso.
La salud de tus dientes y encías está en tus manos. Una higiene adecuada combinada con buenos hábitos de alimentación te ayudará a mantener la salud de tu boca.
Literatura Revisada:
Periodontal Diseases. 2009. American Dental Association. Revisado en agosto 2009 desde: http://www.ada.org/
Periodontal (Gum) Disease: Causes, Symptoms, and Treatments.2009. National Institute of Dental and Craniofacial Research. National Institutes of Health. Revisado en agosto, 2009 desde: http://www.nidcr.nih.gov/