¿Sabías que las semillas te ayudan a tener una mejor salud cardiovascular, gastrointestinal y, además, refuerzan tus defensas? La próxima vez que pases frente a ellas en el supermercado, ¡no las ignores!
Las semillas son las encargadas de nutrir a las plantas y a sus frutos. Por lo tanto, no es sorpresa que contengan tantos nutrientes. Las semillas contienen grasa insaturada, hierro, zinc, calcio, vitaminas del complejo B, fibra y proteínas.Sin embargo, la cantidad de cada una de estas sustancias va a depender del tipo de semilla.
Las semillas más populares son las de linaza, melón, calabaza, ajonjolí y girasol. Éstas poseen ácidos grasos omega 3 y omega 6, los cuales son excelentes para mejorar la salud cardiovascular. También evitan el estreñimiento y bajan el colesterol en sangre por su contenido de fibra. Las semillas de ajonjolí son ricas en vitamina E. Además, son muy útiles y versátiles en la cocina. Es importante tomar en cuenta que las semillas son 80% grasa por lo que se deben comer en moderación para no afectar tu peso.
¿Cómo incluirlas en tu alimentación?
- Sustituye el pan blanco por pan de semillas.
- Agrégale semillas de ajonjolí a tus ensaladas.
- Haz un licuado de yogur con fruta y semillas de linaza molidas.
- Prepara una merienda combinando distintos tipos de semillas, nueces y frutas secas.
- Licua salsa de tomate natural con tus semillas favoritas y agrégasela al pollo, carne o pescado.
- Agrégale pepitoria (semillas de calabaza molidas), limón y sal a tu fruta preferida.
Literatura revisada:
1. Cousin, Pierre Jean; K. Hartvig. The Complete Guide to Nutritional Health.1 sted.USA: Duncan Publishers, 2004.