Cuando un hombre llega a la mediana edad empieza a vivir en una especie de pesadilla, ya que se siente con menos energía y sus músculos parecen perder volumen. Pero lo peor de todo, es que su potencia sexual y su deseo se ven disminuidos, y como si esto fuera poco, ¡su abdomen más abultado se obstina en asomar por encima del cinturón!
Un estudio reciente buscó determinar cómo influye el descenso de las hormonas en los hombres de mediana edad y se descubrió que en esa etapa, hay un aumento de los estrógenos. Estos habitualmente se conocen como las “hormonas femeninas”, y pueden tener parte de la responsabilidad de algunos de los cambios que tanto los aquejan.
Puntos clave
- La testosterona es la hormona responsable de mantener el volumen de los músculos en el hombre
- También regula el deseo sexual
- Hombres y mujeres tienen concentraciones de hormonas masculinas y femeninas
El doctor Peter J. Snyder, profesor de medicina en la Universidad de Pensilvania, encabeza un proyecto que investiga la terapia hormonal en hombres mayores de 65 años. Durante los trabajos se descubrió que el estrógeno, u hormona femenina, comienza a tener mayor incidencia en la fisiología masculina cuando hay un descenso de testosterona.
Los hallazgos revolucionaron un poco las creencias tradicionales, ya que se atribuían los malestares y cambios a la baja de testosterona, la hormona masculina por antonomasia, cuando en realidad el motivo parece ser la suba del estrógeno, esa hormona característica del universo femenino. Eso explicaría que los hombres “padezcan” ciertos cambios físicos típicos de las mujeres a partir de la menopausia, como es el irremediable aumento del diámetro de su cintura.
¿Como se explica? Porque los estrógenos se obtienen a partir de la testosterona. Y el hombre llega a producir tanta que duplica la concentración de esta hormona que tienen las mujeres postmenopáusicas.
Hoy se está llevando adelante otro estudio específico sobre la testosterona. Se buscan tratamientos para devolver la potencia de la juventud a hombres de mediana edad con bajas concentraciones de esta hormona. Pero no solo se trata de energía sexual, sino también de recuperar agilidad y flexibilidad, tener huesos más sanos y fuertes y memoria más activa. Esto podría mejorar su salud, su silueta y con todo esto, su autoestima.