Se trata de un crustáceo que se adapta a todo tipo de comidas: pescados, pastas, ensaladas. Tanto en invierno como en verano, el sabroso camarón puede darle un toque de distinción a muchos de tus platos sin agregar demasiadas calorías.
Además, en su beneficio, nuevos estudios indican que la sospecha de que podía afectar los niveles de colesterolse ha esfumado bastante: una investigación conjunta del Rockefeller University Hospital y de la Harvard School of Public Health determinó que el contenido de colesterol del camarón no es causa de alarma.
Esto se debe a que, aunque tiene una cantidad importante de colesterol, la dieta basada en un elevado consumo de camarones no afectó en forma negativa el perfil de lipoproteína en las personas con niveles normales de colesterol en la sangre.
Además, la dieta a base de camaronestambién logró reducir los niveles de triglicéridos en un porcentaje mayor al de las otras dietas utilizadas en la investigación. Según los expertos, lo que influye más en los índices de colesterol de un alimento es la cantidad total de grasa, y no el contenido de colesterol del mismo.
A nivel mundial existen 342 especies de camarón con valor comercial y tres de ellas son las más importantes en el mercado estadounidense: el camarón tropical, el camarón de río y el camarón de agua fría.
El camarón tropical es el típico crustáceo de cáscara grisácea que se torna rosa al cocinarse, lo que le da el mismo color a la carne. El camarón de río es azulado y más grande —puede superar los 30 centímetros—, se suele vender entero y es el que está vivo en las peceras de mercados y restaurantes. Finalmente, el de agua fría es el más pequeño, y se utiliza mucho en ensaladasya que se vende cocido y pelado. Los que abundan en el mercado estadounidense provienen en su mayoría de los estados de Washington, Oregon y Maine.
Las bondades del camarón son muchas. Una porción para una persona, unos 90 gramos o 3 onzas de camarón cocido, tienen sólo 80 calorías. Además, los que son más pequeños tienen un gramo de grasa total por ración, lo cual es menos que una pechuga de pollo sin piel.
Así que a disfrutar de este fruto de mar… sin culpa.