Si estás siguiendo un programa de ejercicios, debes llevar un dieta adecuada en calorías y nutrientes. Esto lo puedes lograr con alimentos ricos en proteínas, una buena porción de frutas y vegetales, así como un adecuado consumo de carbohidratos.
Alimentos ricos en proteínas
Los alimentos que tienen proteínas en abundancia son los de origen animal como la carne, la leche, el huevo y el queso. También encontramos proteínas en algunos vegetales, pero su fuente principal es la soya y los frijoles.
Puedes completar tus necesidades de proteína con sólo incorporar a tu alimentación diaria un yogur o un vaso de leche, esto te ayudará no solo a formar masa muscular, sino también a fortalecer tus huesos.
Algunas personas, sobre todo los deportistas, tienen la idea de que ingerir proteínas adicionales en forma de suplementos ayuda a mejorar el desempeño deportivo. Sin embargo, en la actualidad, los nutricionistas indican que una dieta regular es suficiente para lograr un buen desarrollo de los músculos.
Tu cuerpo necesita carbohidratos
A pesar de que se habla mal de ellos últimamente, los carbohidratos te brindan toda la energía que necesitas para realizar cualquier actividad física. Si éstos se agotan, tu cuerpo y tu cerebro también se agotarán, ya que los carbohidratos son la fuente de energía preferida del organismo.
Las mejores fuentes de carbohidratos son los cereales de granos integrales, las leguminosas como los frijoles, las frutas y los vegetales.
Si estás consumiendo una dieta baja en calorías, revisa las porciones a las cuales tienes derecho para evitar que subas de peso.
La importancia de la hidratación
El agua también es otro nutriente que, al igual que las proteínas y los carbohidratos, es importante en tu alimentación, pues es el medio ideal para transportar las vitaminas que tu cuerpo necesita, así como los productos de desecho que se forman durante el ejercicio.
Otra razón por la que es necesario tomar suficiente agua, es para que tu cuerpo pueda liberar calor por medio del sudor. Cuando sudas mucho o pierdes mucha agua y no la repones, puede haber deshidratación, por lo que es necesario que tomes agua frecuentemente antes, durante y después del ejercicio.
Logrando resultados
Por último, no te desanimes si la balanza refleja un aumento de tu peso, pues los músculos pesan mucho más que la grasa y seguramente estás ganando masa muscular y perdiendo grasa.