En menos de una hora de haber tomado tu café matinal empiezas a percibir los efectos de la cafeína en tu cuerpo. Sientes más energía, estás más alerta, más productiva. La sensación de cansancio quedó atrás.
Si tú eres de esas personas que se apoyan en la cafeína para dejar la fatiga atrás, no estás sola: nueve de cada 10 estadounidenses consumen algún tipo de cafeína diariamente. Ya sea a través de los cafés o de medicamentos que contienen esta sustancia.
Aunque está comprobado que la ingesta de cafeína en forma moderada no provoca daños al organismo, consumirla en exceso puede afectar notoriamente la salud.
Pero, entonces… ¿cuánto es mucha?
Para un consumidor que no tenga sensibilidad a la cafeína, la delgada línea roja está entre 500 a 600 mg al día, o el equivalente de 4 a siete tazas de café, cantidades que pueden causar:
- Agitación
- Ansiedad
- Irritabilidad
- Temblores musculares
- Insomnio
- Dolores de cabeza
- Náuseas, diarreas y otros problemas estomacales
- Arritmias
Si eres sensible a esta sustancia, menos cantidad puede causar los mismos efectos. La sensibilidad depende de diversos factores como el índice de masa corporal y la propia historia de consumo de este estimulante: aquellos que no consumen café regularmente tienden a ser menos susceptibles a sus efectos negativos que aquellos que sí lo hacen.
Y debes tener en cuenta que las situaciones de estrés pueden aumentar la sensibilidad a la cafeína. Y que esta sustancia interfiere negativamente con tu ciclo del sueño si bebés café por la noche.
Modificar la conducta frente a la cafeína, y en especial modificar la cantidad que se ingiere, es un proceso que debe hacerse gradualmente: cualquier cambio abrupto puede ocasionar irritabilidad, dolor de cabeza y nerviosismo.
Para adoptar nuevos hábitos, te recomendamos:
Conoce cuánta cafeína consumes en tus bebidas y comidas.Cuando te fijes en las etiquetas es probable que te lleves una sorpresa porque estés consumiendo más de lo que debes.
Reduce el consumo de a poco.Ve tomando un poco menos de café cada día, hasta llegar a un límite que esté dentro de los patrones de la salud.
Comienza a reemplazar por productos descafeinados.Aunque no están libres por completo de cafeína, la suma diaria final claro que será menor.
Elige té de hierbas.Que no contienen cafeína.
Chequea la cantidad de cafeína en medicamentos de venta libre.Medicinas que atacan el dolor como la excedrina o el anacin pueden contener entre 65 y 130 mg de cafeína en una dosis. Opta por los medicamentos libres de cafeína.