La comida es algo cultural y la cultura de la comida ha cambiado. En los años 60, en Estados Unidos, la cena ideal debía contener sí o sí carne roja y puré de papas (mashed potatoes). Hoy, se sabe que lo sano tiene forma de vegetal y fruta, y ciertos hábitos del pasado deban quedar... en el pasado.
Por eso, para lograr el peso ideal sin nostalgias y sin sufrir, expertos de la Harvard Medical School ofrecen cinco consejos que pueden ayudar a encontrar el camino hacia una dieta más saludable. Son los siguientes:
1. Hay que pensar en la nueva dieta como en un juego, buscar nuevos ingredientes, probar nuevas recetas. El aburrimiento es el enemigo número uno de una buena dieta.
2. Cambiar de a poco es la mejor alternativa. Al llegar a los 40, una persona ya ha tenido unas 40.000 comidas, y decenas de miles de snacks. Hay que darse tiempo para incorporar cosas nuevas a la dieta con éxito.
3. Lo mejor es comenzar con el desayuno y guardar la dona, el muffin o el bacon en el cajón de los recuerdos. Hay que tomarse 10 minutos para comer un desayuno con fibra, es decir, cereal. Esto ayudará a elegir mejores alimentos a lo largo del día.
4. Luego, el almuerzo. Probar ensaladas, yogur bajo en calorías o sandwiches de atún o mantequilla de maní en vez de fiambres. Ese será un pequeño paso para la humanidad, pero uno enorme para una persona que intenta comer más sano.
5. En la cena, nada mejor que la opción de poner a la parrilla un pescado o pollo. Las ensaladas y las verduras deben ser las mejores amigas para tener sensación de saciedad.