Fentanyl, más potente y letal que la heroína

Durante las últimas tres décadas, las muertes por sobredosis de fármacos en Estados Unidos se han disparado. En 2013 hubo 25,000 muertes atribuidas al abuso de drogas de prescripción o recetadas -2,5 más veces que en el año 2001- según datos del reporte de 2015 del Instituto Nacional de Abuso de Drogas (NIDA por su sigla en inglés).

Dentro de esta tendencia, los opiáceos como el fentanyl generan una gran preocupación, pues son drogas muy poderosas que los médicos recetan para casos agudos de dolor y que la gente consume ahora para recreación en forma directa o a través de la mezcla con heroína.

La droga, según un informe de la DEA (Drug Enforcement Administration) es 50 veces más poderosa que la heroína y causó 143 muertes por sobredosis en Nueva Jersey en 2014, frente a las 49 de 2013. Las autoridades de salud reconocen que existe una gran preocupación. 

"El fentanyl es poderoso y extremadamente difícil de controlar, ya sea que se consuma casualmente o a través de la mezcla con heroína: a menudo es una sentencia de muerte", dijo Steven Marcus, director del Centro de Control de Envenenamiento de Nueva Jersey en la Universidad de Rutgers.

Las mezclas con fentanyl pueden ser fatales. En febrero de 2014 murieron 80 personas por consumir heroína adulterada en New Jersey, Maryland, Pennsylvania y Rhode Island. La droga estaba mezclada con fentanyl, la misma que también causó el fin trágico del actor Philip Seymour Hoffman y más recientemente del músico Prince. Y las autoridades federales han reportado al menos 700 muertes relacionadas con fentanyl entre 2013 y 2014.

¿Qué es un opioide sintético?

El fentanyl, al igual que la metadona y la mepiridina es considerado un opioide sintético (es un producto legalmente creado en laboratorios como resultado de la combinación de otras sustancias químicas).

Al igual que la heroína, la morfina y otros opioides, actúa en áreas que controlan el dolor y las emociones y unida a ciertos receptores cerebrales, hace subir los niveles de dopamina en las áreas de recompensa, produciendo un estado de euforia y relajación. 

La morfina y la codeína son consideradas opioides naturales según el sitio opiateaddictionresources.com. Es decir que se encuentran naturalmente en la resina del opio de las amapolas. Aunque existen más de 25 alcaloides diferentes el opio, la morfina y la codeína son los únicos que se usan como analgésicos o narcóticos.

Hay otros analgésicos potentes que se utilizan medicinalmente y que son semisintéticos (una combinación de narcóticos naturales con sintéticos), como la hidrocodona, oxicodona, hidromorfona, oxymorfona y la buprenorfina.

 Fentanyl, peligroso en las calles y los hogares

Como droga de prescripción, el fentanyl puede estar en armarios, cajones y botiquines de las casas de algún enfermo con dolor crónico, como los pacientes con cáncer en su fase terminal o aquellos que tienen dolor agudo luego de una cirugía. 

Se conoce comercialmente bajo el nombre de Actiq, Duragesic y Sublimaze. 

En abril de 2012 la FDA (Food & Drug Administration) advirtió a la población sobre muertes en niños derivadas del mal uso y mala eliminación de los parches de fentanyl. En un caso, un niño recibió una sobredosis de la droga al manipular un parche que se había desechado en un basurero a su alcance. En otro caso, el parche se transfirió por accidente de un adulto a un niño cuando lo tenía en brazos.

En la calle, los jóvenes se refieren al fentanyl como: Apache, China girl, China white, Dance fever, Friend, Goodfella, Jackpot, Murder 8, TNT, Tango y Cash, informan los NIDA (National Institutes for Drug Abuse).

Es incoloro e inodoro, por lo que es casi imposible de detectar, de ahí la dificultad a que se enfrentan las autoridades para frenar el avance del abuso y el consumo ilegal.

La mezcla de fentanyl con heroína o cocaína, multiplica notablemente su potencia y los peligros potenciales. Los efectos incluyen: euforia, somnolencia, depresión respiratoria y paro, náuseas, confusión, estreñimiento, sedación, pérdida del conocimiento, adicción, estado de coma y potencialmente la muerte.

Para consultar sobre intoxicación con sustancias, abuso de fármacos o para pedir ayuda, se puede llamar las 24 hs. los 365 días del año a: 

American Association of Poison Control Centers

1-800-222-1222.