Definición
Después de una cirugía o lesión, su hijo puede necesitar muletas para caminar. Su hijo necesita muletas para apoyarse de manera solo ponga peso parcial o que no ponga peso sobre su pierna lastimada. El uso de muletas no es fácil y requiere práctica. Asegúrese de que las muletas de su hijo le queden bien y aprenda algunos consejos de seguridad.
Ajustar las muletas
Solicítele al proveedor de atención médica de su hijo que adapte las muletas para el niño. El ajuste apropiado hace que sea más fácil el uso de las muletas y evita que su hijo se lastime al utilizarlas. Incluso si las muletas le quedan bien:
- Mantenga las tapas de caucho en las almohadillas debajo de los brazos, los mangos y las patas.
- Ajuste las muletas al largo apropiado. Con las muletas derechas y su hijo de pie, verifique que usted pueda poner 2 dedos o una pulgada entre la axila de su hijo y la parte superior de las muletas. No deben apoyarse en las muletas contra las almohadillas de las axilas. Las almohadillas para muletas contra la axila pueden provocar erupciones a su hijo y ejercer presión sobre los nervios y los vasos sanguíneos del brazo. Una presión excesiva puede dañar los nervios y los vasos sanguíneos.
- Ajuste la altura de los mangos. Deben quedar donde estén las muñecas de su hijo cuando sus brazos estén colgando al lado o por la cadera. Los codos deben estar suavemente flexionados cuando se sujetan los mangos estando de pie sin que las muletas toquen las axilas.
- Verifique que los codos de su hijo estén ligeramente flexionados al comenzar a utilizar las muletas y luego extendidos al dar un paso.
Consejos de seguridad
Enséñele a su hijo a:
- Mantener siempre las muletas cerca, fácilmente a su alcance.
- Usar zapatos que no se deslicen, evitar por ejemplo, pantuflas o chanclas.
- Desplazarse lentamente. La muleta puede quedar atrapada en algo o resbalar al tratar de moverse muy rápido.
- Tener cuidado con superficies resbalosas. Las hojas, el hielo y la nieve son resbaladizas. Resbalarse no suele ser un problema sobre carreteras o aceras mojadas si las muletas tienen puntas de caucho. Pero las puntas mojadas de las muletas en pisos interiores pueden ser muy resbaladizas.
- Nunca colgarse sobre las muletas. Esto ejerce presión sobre el nervio del brazo y puede causar daño.
- Llevar consigo un morral con cosas que necesite. De esta manera, las cosas son de fácil acceso y no estorban.
Las medidas que los padres pueden tomar:
- Guardar las cosas en su casa que podrían hacer tropezar a su hijo. Esto incluye cables eléctricos, juguetes, alfombras y ropa en el suelo.
- Hablar a la escuela de su hijo para que le den tiempo extra para desplazarse entre las clases y para evitar aglomeraciones en los pasillos. Averigüe si su hijo puede pedir permiso para usar los elevadores y evitar las escaleras.
- Revisar las patas de las muletas en busca de huella. Verifique que no sean resbaladizas.
- Revisar los tornillos de las muletas con frecuencia. Estos se aflojan fácilmente.
Cuándo contactar a un profesional médico
Comuníquese con su proveedor de si su hijo no parece estar seguro con las muletas incluso después de practicar con usted. El proveedor puede remitirlo a un fisioterapeuta que le pueda enseñar cómo usarlas.
Si su hijo se queja de hormigueo, entumecimiento o pérdida de la sensibilidad en el brazo o la mano, llame al proveedor.
Referencias
American Academy of Orthopaedic Surgeons website. How to use crutches, canes, and walkers.
Edelstein J. Canes, crutches, and walkers. In: Webster JB, Murphy DP, eds. Atlas of Orthoses and Assistive Devices. 5th ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2019:chap 36.
Osorio M, Tsao E, Apkon SD. Ambulation assistance. In: Kliegman RM, St. Geme JW, Blum NJ, Shah SS, Tasker RC, Wilson KM, eds. Nelson Textbook of Pediatrics. 21st ed. Philadelphia, PA: Elsevier; 2020:chap 733.