Los 7 'pecados' que puedes cometer para la dieta

Hay que recordar que la pizza tiene dos alimentos fundamentales para el organismo: queso, fuente de calcio; y tomate, fuente del rejuvenecedor licopeno. Claro, es mejor que sea con harina integral y casera, para evitar el exceso de sal.

Toda dieta baja en calorías tiene un "día permitido", así que ampárate en el amor infantil por la pizza y déjate llevar una vez a la semana. Pero elige un queso 'light', masa integral, y cárgala de vegetales. Mide tus porciones y díle NO a la de albóndigas.

Todos sabemos que la manzana es el alimento bendito para la dieta, pero el chocolate ya no se considera un alimento maldito para la figura. El cacao natural y el chocolate oscuro son bajos en azúcar y ricos en antioxidantes y flavonoides que aportan energía y alargan la vida.

Un estudio del Hospital Sir Charles Gairdner de Australia avala su consumo moderado. Aseguran que las personas que lo comen una vez a la semana son menos propensas a ser hospitalizadas a causa de una afección cardíaca.

Los yogures helados o helados de leche ofrecen un buen aporte de calcio. Ojo con los que son a base de crema que pueden sumar demasiadas calorías. Cuidado también con la cantidad de azúcar, pero con moderación las versiones 'light' ayudan a fortalecer los huesos. Consejo: combinalos con fruta fresca para llenar el plato y sentirte satisfecho con menos.

Se sabe que en su justa medida, el alcohol puede ser algo positivo para tu salud cardíaca. Decenas de estudios amparan esta hipótesis. Eso sí: se trata de un trago, no de varios, sino el efecto es exactamente el inverso. Puedes elegir una cerveza light o una copa de vino tinto.

Cuidado con ese eslogan, pero sí, ahora hay chicles que hasta los dentistas les dan a los niños... son aquéllos que no tienen azúcar y que reducen el riesgo de caries. Además hay expertos que aseguran que masticar un chicle de menta después de la comida ayuda a resistir la tentación del postre.

Las películas sin palomitas de maíz son como un Thanksgiving sin pavo. Al natural, sin mantequilla y sin sal, pueden ser saludables por la cantidad de fibra que le suman a tu dieta. Pero cuidado con las palomitas en el cine. Una bolsa mediana ¡puede sumar hasta 1.200 calorías!

Es verdad: suman sodio y no nutren. Pero un trabajo de la Universidad de California en San Francisco comprobó que tomar gaseosas dietéticas puede reducir el riesgo de que el riñón produzca piedras de calcio.

La siesta. Para algunos es una pérdida de tiempo y un hábito incompatible con la vida moderna. Pero, para la Asociación Nacional de Amigos de la Siesta de España tomarse un descanso en medio del trajín diario es bueno para descargar estrés, cargar las baterías y prevenir males cardíacos.

La vitamina D se consigue por los rayos del sol que impactan en la piel, a través de ciertos alimentos y de los suplementos. Así que un ratito de sol no está mal... pero con protector, porque si se toma demasiado puede envejecer la piel y hasta causar cáncer.

Una investigación de la Universidad de Granada comprobó que los videojuegos usados en forma moderada mejoran los reflejos y no afectan el rendimiento escolar o laboral. Y, dicen, ayudan a liberarse del estrés.

Por eso, recomiendan revertir su principal efecto negativo: que un miembro de la familia se aísle. Por el contrario, el videojuego puede ser una vía para acercar a padres e hijos de una forma saludable y preventiva. Eso sí, los violentos no están en la lista de los recomendados.