Caras vemos, sonrisas no sabemos

No todas las sonrisas son iguales y por ende no respondemos de la misma forma a una sonrisa cortés y educada que a una sonrisa sincera, así lo ha dado a conocer un estudio de la Universidad Bangor, en Reino Unido que fue publicado en la revista Psychological Science.

Si pensabas que al disimular con una sonrisa tu enojo o tristeza podrías pasar desapercibido, estás en un error. Según el estudio, cuando alguien sonríe con franqueza y de manera espontánea, se puede identificar con mayor velocidad que cuando se hace por compromiso o cortesía.

Esto se comprobó a través del uso de sensores eléctricos, los cuales pudieron detectar que ante una sonrisa sincera reaccionan ciertos músculos de la boca de quienes las observan, los cuales permanecen impasibles cuando la sonrisa no es auténtica.

Los problemas dentales representan cientos de miles de visitas al área de urgencias cada año. Desafortunadamente, es un tema que no se aborda en la Ley de Cuidado de Salud a Bajo Precio.

La reforma de salud establece que todos los consumidores contarán con un plan de salud que cubra todo: desde recibir atención médica, medicamentos, hasta ver a un psicólogo, pero no hay nada sobre la cobertura dental o algún requisito para que las aseguradoras paguen por el cuidado de las dentaduras de la Unión Americana.

De acuerdo con el presidente de la Asociación Dental Americana (ADA), Robert Faiella, la ley incluye algunas disposiciones para los servicios dentales de los niños, como un beneficio para la salud esencial que estipula la cobertura de ortodoncia, pero no incluye una cobertura adicional para los adultos.

Un estudio hecho por investigadores de la Universidad de Boston, encontró tras revisar los datos de pacientes de 2000 a 2008, que las personas hospitalizadas por absesos dentales (una infección que podría ser mortal) aumentaron de 2005 a 2008 más del 40%, es decir 8.141 casos. Según el análisis 66 pacientes murieron.

“La gravedad de las infecciones dentales que no reciben tratamiento son tratadas demasiado tarde y es un problema más grande de lo que habíamos estimado”, comentó el Dr. Frank Catalanotto, presidente del departamento de la odontología comunitaria y ciencias en la Universidad de Florida.

Por si fuera poco muchos pacientes han descuidado considerablemente su salud bucal. Según la ADA el porcentaje de adultos que acuden al dentista se ha reducido del 41% en 2003 al 37% en 2010, lo que ha dado pie a que el número de visitas a urgencias de duplique a más de 2 millones entre 2000 y 2010.

Según algunos análisis, de 2000 a 2008 atender a los pacientes con infecciones severas a causa de problemas dentales le ha costado al sistema de salud aproximadamente 858.9 millones de dólares, claro, después del ajuste por inflación.

Varios analistas consideran que lo relativo a la cobertura dental de los niños estarían fracasando, ya que en algunos mercados de seguros los planes dentales se venden por separado, por lo que los consumidores que compran un plan de salud puede negarse a añadir seguro dental para sus hijos sin enfrentar una sanción.

No es necesario llevar un peinado estrafalario ni la ropa de novedad. Con una sonrisa de oreja a oreja es suficiente, ya que puede ayudar a que la gente te ubique más fácilmente.

En el estudio de la Universidad de Bangor, los voluntarios revisaron fotos de personas serias y otras de sonrientes, junto con sus nombres de pila. Al final se halló que la corteza orbitofrontal y el hipocampo (sede de la memoria), mostraban más actividad en los sujetos cuando recordaban los nombres de quienes sonreían.

“Nuestras neuronas espejo desean que recordemos a las personas que han sido amables con nosotros, en caso de que debamos relacionarnos con ellas en el futuro”, explicó Takashi Tsukiura, coautor del trabajo de investigación.

Después de leer esto vas a querer sonreír todo el tiempo. El profesor Theo Gevers, de la Universidad de Amsterdam, junto con sus colegas han creado en internet una extensa base de datos de sonrisas, las cuales les ha permitido averiguar que cuando sonreímos con franqueza aparentamos una edad diferente.

Según el profesor Gevers, las personas mayores de cuarenta años parecen más jóvenes cuando sonríen, pero en cambio, quienes andan debajo de este rango, sonreír puede hacerlos aparentar más edad.

Un estudio hecho por la Universidad de Sevilla reveló que las sonrisas de lo más influyentes del mundo, elegidos por Time entre 2006 y 2010, tienen similitudes, por ejemplo, la encía superior no está expuesta más de 1 o 2 milímetros y el labio superior debe ser un poco más prominente que el inferior.

Depende del género. Un estudio de la Universidad de British Columbia reveló que las mujeres se sienten menos atraídas sexualmente por los hombres que parecen felices, pero en el caso de los hombres, las mujeres se les hacen irresistibles cuando sonríen de oreja a oreja.