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7 alimentos con etiquetas engañosas
Por ggarcia@holadoctor.net
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Etiquetas mentirosas
“Las etiquetas de los alimentos confunden a los consumidores”. Esto afirma Temple Northrup, profesor de la Escuela de Comunicación Jack J. Valenti de la Universidad de Houston. Muchas veces se usan términos que pretenden hacer pasar por sano un alimento que no lo es. ¿Cuáles son estas palabras tramposas?
1. Orgánico
Un informe del Journal Americano de Nutrición Clínica demostró que los consumidores pagan más por los productos orgánicos porque suponen – erróneamente – que son más sanos o que tienen mejor valor nutricional o menos calorías. En algunos casos pueden estar menos contaminados que los “comunes”.
¿Qué es orgánico?
Un producto orgánico no solo se refiere al alimento en sí mismo sino también a cómo fue obtenido. Debe estar inscripto en el Programa Organico Nacional (NOP) y si son cultivos, no tratarlos con pesticidas o fertilizantes sintéticos. Los animales para el consumo humano deben poder circular libremente y no recibir hormonas.
2. Multigrano
Muchas personas confunden multigrano con grano entero. Según Katherine Zeratsky, nutricionista de la Clínica Mayo, el grano entero contiene el salvado, el germen y el endospermo, que le aportan más nutrientes y fibra. Multigrano indica que hay varios tipos de grano, aunque ninguno de ellos sea entero.
Natural a la fuerza
El profesor Northup explica que durante la molienda, los granos pasan por un intenso proceso de refinamiento donde se retira el salvado y el germen y con ello, la mayor parte de su contenido nutricional. Para compensar esta pérdida, se suele agregar colorantes y saborizantes a los productos para que parezcan más “naturales”.
3. Libre de gluten
El gluten es una proteína de los granos como el trigo, la cebada y el centeno. Las personas con enfermedad celíaca no lo pueden procesar y deben evitar su consumo. Hay productos que no contienen gluten, “pero se les suele agregar azúcar y grasas para lograr una textura y un sabor agradables”, explica Northup.
Información confusa
El profesor Northup sostiene que en la población hay mucha confusión sobre lo que significa “saludable”, sumado al hecho de que no entienden bien lo expuesto en las etiquetas de información nutricional. Y esto, según el experto, contribuye a aumentar la epidemia de obesidad de EE.UU.
4. Antioxidantes
Para Michael Jacobson, director del Centro para la Ciencia en el Interés Público (CSPI) este término crea la impresión de que el producto es saludable y puede ayudar a prevenir enfermedades. Pero hay poca evidencia de que los antioxidantes agregados a alimentos o suplementos tengan algún beneficio para la salud.
Antioxidante no significa salud
Jacobson explica que hay bebidas que contienen antioxidantes, pero que también son azucaradas y promueven la obesidad, diabetes y deterioro dental... y ningún antioxidante puede revertir estos daños. “Agregar antioxidantes a una soda es como ponerle mentol a un cigarrillo, esto no los convierte en un producto más saludable”, agrega.
5. Hecho con fruta “real”
El quid de la cuestión es ¿cuánta fruta real? Porque basta con que un producto tenga sólo una pequeña cantidad para poder anunciarlo en la etiqueta y no mentir. Según Northup, muchas personas creen que una porción de tarta de fruta o un caramelo de sabor frutal tiene algunos de los beneficios de la fruta entera.
Dibujos confusos
La bebida V8 ofrece en su etiqueta 100 % de jugo vegetal. El fabricante cuenta con otras dos bebidas: V8 Splash y V8 V-Fusion Refresher que tienen entre 5 y 25 % de jugo. Según CSPI, las etiquetas son confusas en el contenido de jugo natural y valor nutricional y están ilustradas en forma similar al producto que tiene 100% de jugo .
6. Reducido en grasas, bajo en azúcar
Para Northup, muchos productos que se ofrecen con menos grasa o azúcar son más saludables que sus versiones originales, pero no por eso recomendables. Jacobson coincide y agrega que estos términos se suelen usar para mayonesas, productos horneados y chips, productos de alto valor nutricional, sodio y harinas blancas.
Cuidado con lo bajo en grasa
Quien quiera bajar de peso, puede evitar los alimentos etiquetados como “bajos en grasa”: además de pagarlos más caro engordan más que los comunes. Así opina Nina Teicholz, periodista especializada en ciencias de la nutrición, que agrega que los fabricantes logran la textura perdida al eliminar las grasas con carbs o azúcar.
7. Alimento no modificado genéticamente (no GMO)
Jacobson informa que no hay evidencia de que los alimentos derivados de organismos genéticamente modificados sean nocivos para la salud. Además, muchas comidas que dicen ser no GMO contienen aceite de soja, azúcar o ingredientes derivados de plantas que sí han sido genéticamente modificadas.