10 señales de alerta de la artritis

Uno de los síntomas más comunes de esta enfermedad es presentar dolor. La inflamación de las articulaciones, el daño articular, el esfuerzo muscular y la fatiga pueden producirlo. Esto puede llegar a limitar las capacidades del paciente, según informan los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).

En tanto, el paciente también puede notar que las articulaciones no se mueven con la misma facilidad que antes. Además de la pérdida de movimiento, este signo puede venir de la mano de dolor, según la Arthritis Foundation. Se calcula que existen hasta 100 diferentes tipos de artritis.

Aunque no suele suceder en todos los casos, también puede presentarse hinchazón. Esto por la acumulación de líquido en los tejidos blancos que rodean la articulación, según la Biblioteca Nacional de Medicina. La misma hinchazón puede hacer que la articulación parezca más grande o de forma anormal.

El historial clínico familiar también es un signo al que hay que prestar atención. De acuerdo con la Arthritis Foundation existen marcadores genéticos que juegan un papel importante en algunos tipos de artritis, como la osteoartritis, la artritis reumatoide y el lupus eritematoso sistémico.

El clima no es en sí una causa de la artritis, pero puede poner al descubierto los signos más evidentes en los pacientes que desconocen que tienen esta enfermedad. El clima frío, la humedad de la lluvia o nieve, pueden incrementar el dolor o la rigidez. (CDC)

El sobrepeso puede influir en el desarrollo de algunos tipos de artritis. De hecho, si se tiene hay mayores probabilidades de presentar osteoartritis en la rodilla, advierten los CDC. Algunas actividades que requieran doblar las rodillas de manera repetitiva, también podrían desencadenarlo.

El riesgo de padecer artritis incrementa con la edad. La mayoría de los tipos de artritis son más comunes en las mujeres con el 60% de los casos. Sin embargo, la gota es una de las enfermedades más comunes en los hombres.

Es importante preservar la salud de las articulaciones ya que pueden influir en la productividad y calidad de vida de las personas. Para ello se sugiere hacer ejercicio de 30 a 60 minutos al día 5 veces a la semana con el fin de lubricar las articulaciones y darles mayor movilidad.

Existen maneras de controlar el dolor, como terapias, masajes y algunos medicamentos. El tratamiento de esta afección se centra en minimizar el daño a las articulaciones, bajar el dolor y mantener la calidad de vida del paciente.

Científicos del Instituto de Reumatología Kennedy de la Universidad de Oxford desarrollaron un marcador que puede predecir si hay riesgo de tener artritis reumatoide incluso 16 años antes de aparición. Según los investigadores, esto ayudaría a que los pacientes reciban el tratamiento adecuado y mejoren su calidad de vida.