Joan Rivers, víctima de la negligencia médica

Todo comenzó la mañana del 29 de agosto de 2014 en la clínica Yorkville Endoscopia de Manhattan. La comediante Joan Rivers se encontraba ahí para una endoscopia debido a una molestia persistente en la garganta que le había ocasionado presentar una voz ronca.

A partir de entonces nada volvió a ser igual. La artista sufrió un paro respiratorio que la llevó a estar después en un coma inducido, auxiliada por un respirador artificial del que días después fue desconectada.

Joan Rivers, víctima de la negligencia médica
Getty Images

Aunque la estadounidense ya se encuentra descansando en paz, nuevos hallazgos han surgido en torno a su deceso, en donde todo parece indicar que la negligencia médica la habría mandado directo a la tumba.

De acuerdo con el testimonio de un miembro de la clínica Yorkville, el médico que se encargó de operar a Rivers le realizó una biopsia en las cuerdas vocales para la cual no tenía permiso tanto de la clínica como del paciente.

Según las indagaciones de los expertos, esta práctica habría causado que las cuerdas vocales de la artista se hayan hinchado tanto al grado de cortar el flujo del aire a sus pulmones, lo que más tarde derivó en el paro respiratorio.

Al respecto, Yorkville Endoscopia emitió un comunicado en donde desmintió los informes sobre tal procedimiento médico, pese a que le ley federal de privacidad prohíbe que cualquier tipo de información del paciente sea divulgada.

Por si la falta anterior no fuera suficiente, el especialista consultado por CNN confirmó también que el mismo doctor que intervino a Rivers, se tomó una “selfie” mientras ella se encontraba totalmente inconsciente.

Y es que hablar de negligencia médica es tratar con una de las mayores causas de muerte en el mundo, incluso, por encima del sida, el cáncer de seno y los accidentes automovilísticos, informa Lozner Mastropietro, un despacho jurídico que atiende este tipo de casos.

Tan solo en un año, más de 1.3 millones de personas son lesionadas debido a los errores médicos, mientras en ese mismo lapso 98,000 personas pierden la vida.

Algunos ejemplos de negligencia profesional médica pueden ser lesiones de nacimiento, fallo para diagnosticar cáncer o ataques cardiacos, error en el tratamiento o retraso en éste, errores en la administración de anestesia, lesiones de parto, así como fallas al momento de recetar medicamentos o dar seguimiento a un caso.

Antes de someterse a un procedimiento quirúrgico se recomienda siempre investigar sobre la reputación de los médicos. Para enterarse sobre la mala conducta profesional, la disciplina de los médicos o la calidad de servicio puedes visitar http://www.healthgrades.com/ 

Para información sobre la negligencia profesional médica tal como la reporta el Centro para la Justicia y la Democracia (Center for Justice and Democracy), visita: http://www.centerjd.org 

Para contar con más información médica puedes visitar la página http://medline.gov 

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