Alejandra Guzmán, a un año de su última operación

La vida le ha dado una segunda oportunidad a la cantante Alejandra Guzmán. Luego de haberse sometido a un tratamiento que casi termina con su vida, ella ahora ve las cosas con un enfoque diferente y procura sacarle el máximo provecho.

Alejandra Guzmán, a un año de su última operación
Mezcalent | Foto: MEZCALENT

Puntos clave

  • La artista se sometió en 2009 a un tratamiento estético nocivo.
  • La cantante se sometió en los últimos cuatro años a 18 operaciones.
  • En la actualidad ya se encuentra rehabilitada.

A través de las redes sociales la rockera compartió con sus seguidores parte de su sentir. “Hoy hace un año fue mi última operación y me da gusto verlo tan lejano y sentirme bien”, publicó.

Y es que en 2009, la artista vivió todo un martirio que comenzó cuando recurrió a un procedimiento estético para aumentarse el volumen de las nalgas mediante la inyección de un polímero, el cual casi termina con su vida y la llevó a permanecer internada durante varios meses.

“Yo tuve abierto mi cuerpo cuatro meses, tuve un sistema que te va chupando las bacterias, entonces tengo mucha suerte de estar aquí porque también se me reventó un arteria y casi me amputan la pierna”, comentó en alguna ocasión la artista.

En total, fueron 18 las operaciones a las que se sometió en donde incluso, le amputaron la mitad de la espalda, lo cual la ha orillado a tener varios cambios en su vida. “Me cuido y me quiero, veo por mi salud. Ahora han cambiado las cosas, ya no me dedico a las fiestas”.

En muchas ocasiones querer lucir bella tiene un alto costo ya que existen muchas clínicas clandestinas que utilizan procedimientos estéticos sumamente peligrosos, como le ocurrió a la cantante Alejandra Guzmán.

De acuerdo con el endocrinólogo de la Clínica Condesa, en la ciudad de México, Ricardo Espino Jara las consecuencias de inyectarse químicos en los glúteos comienzan a aparecer varios meses después. “Si no ocurre nada en el primer año, los pacientes creen que no pasó nada, pero ese líquido se va encapsulando y va bajando a los pies, hay cambios en la coloración en la piel, se va acartonando, se va haciendo un tono más parduzco ”, explicó.

Otro caso lamentable le ocurrió a la modelo coreana Hang Mioku, quien pasó de tener un rostro bello a una completamente irreconocible al inyectarse silicona y aceite de cocina en su cara. El rostro quedó sumamente desfigurado y lleno de cicatrices que incluso sus padres no la reconocieron la primera vez.

Para evitar este tipo de situaciones los centros de Servicios de Medicare y Medicaid sugieren a las personas a que recurran a una segunda opinión, que es cuando un médico que no es el de cabecera da su postura sobre un problema de salud y cómo debe ser tratado.

Recurrir a una segunda opinión puede ayudarte a tomar una mejor decisión acerca de cualquier procedimiento.

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