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Los autistas podrían sentir el dolor con mayor intensidad

Las personas que sufren de autismo sienten el dolor con una intensidad más alta que las demás, que es lo contrario de lo que muchos creen, sugiere una investigación reciente.

La creencia prevalente es que los autistas son indiferente al dolor, quizá debido a una tendencia a las autolesiones. Pero "esta suposición no necesariamente es cierta", señaló la Dra. Tami Bar-Shalita, de la Facultad de Medicina Sackler de la Universidad de Tel Aviv, en Israel.

Los autistas podrían sentir el dolor con mayor intensidad
| Foto: GETTY IMAGES

"Sabemos que las autolesiones pueden surgir de intentos de suprimir el dolor, y podría ser que se hieren a sí mismos con el fin de activar, de forma inconsciente, un mecanismo físico de 'el dolor inhibe al dolor'", comentó Bar-Shalita.

Los investigadores deseaban saber si las personas con autismo sienten más dolor que la población general.

Alrededor de un 10 por ciento de la población general sufre de una disfunción de la modulación sensorial, explicó Bar-Shalita. Esto significa un nivel de hipersensibilidad sensorial que puede interferir con el funcionamiento diario normal, por ejemplo tener problemas para ignorar o adaptarse a unas luces parpadeantes o al ruido de un aire acondicionado o ventilador.

Estudios anteriores han encontrado que las personas con esta disfunción de la modulación sensorial experimentan más dolor, apuntó Bar-Shalita. Esta disfunción ocurre en las personas con autismo a una tasa de un 70 a un 90 por ciento. Es uno de los criterios que se utilizan para diagnosticar el autismo, y se asocia con la gravedad del autismo.

El estudio incluyó a 52 adultos con un autismo de alto funcionamiento y a 52 personas sanas. Los investigadores usaron pruebas psicológicas para evaluar el dolor con el fin de examinar el vínculo entre el estímulo y la respuesta.

Un investigador usaba una computadora para controlar la duración y la intensidad del estímulo. Se pedía a la persona examinada que calificara la intensidad del dolor en una escala de 0 a 100.

El estudio encontró que las personas con autismo sentían más dolor, y que su mecanismo de supresión del dolor era menos efectivo.

"La creencia prevalente es que supuestamente son 'indiferentes al dolor', y hay informes de que el personal médico y otros profesionales los tratan en consecuencia. Los resultados de nuestro estudio indican que, en la mayoría de los casos, la sensibilidad al dolor de las personas con autismo es en realidad más alta que la de la mayoría de la población, al mismo tiempo que no tienen éxito al suprimir de forma efectiva los estímulos dolorosos", señaló Bar-Shalita.

"Esperamos que nuestros hallazgos beneficien a los profesionales y a los practicantes que gestionan a esta población, y que contribuyan al avance del tratamiento personalizado", añadió Bar-Shalita.

El estudio fue financiado por la Israel Science Foundation. Los hallazgos se publicaron en la revista PAIN.

Más información

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU. ofrecen más información sobre el trastorno del espectro autista.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com


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