Comedora nocturna deja el hábito y baja 2 talles

Como tantas otras, Aysha Hoare es una joven de 23 años que se cuidaba mucho con las comidas: durante el día comía sano y su dieta incluía muchas ensaladas. También hacía ejercicio, y sin embargo no lograba tener una figura estilizada. 

El problema era que por la noche, cuando toda su familia se había ido a dormir, bajaba sigilosamente la escalera rumbo a la cocina y picoteaba cualquier cosa dulce que encontrara en la alacena o la heladera. 

Comedora nocturna deja el hábito y baja 2 talles
| Foto: THE GROSBY GROUP

Otras veces cuando volvía del gimnasio deseaba intensamente comer algo dulce, sintiendo que se lo merecía por haber hecho el esfuerzo de hacer ejercicio.

La situación en su trabajo tampoco era un campo propicio para comer sano ya que siempre estaba muy atareada y elegía cualquier cosa, como galletas o comida chatarra. Cuando iba rumbo al trabajo no faltaba en su bolso un paquete de bizcochos, ni dulces en sus bolsillos o en el auto, donde aprovechaba el viaje para engullir lo que pudiera.

Un día decidió poner punto final a su conducta furtiva y empezó un programa de nutrición y ejercicio. Y en lugar de bizcochos y tortas comenzó a comer preparaciones con proteína, que le servían para mejorar su rendimiento físico. 

En solo 12 semanas logró perder 4,4” pulgadas (11.2 cm) de contorno de busto y 2,2” pulgadas (5,6 cm) de cadera. En la balanza el cambio fue rotundo ya que de 147 libras (66,6 kg) alcanzó las 113 libras (51,2 kg), y pudo empezar a usar prendas talle 8 (foto arriba). 

La joven dice que lo que la ayudó es sentirse motivada: el tener que seguir un plan la ayudó a cambiar de hábitos y hacer el esfuerzo por evitar las tentaciones. Y si bien reconoce que le resultó muy difícil eliminar de su cabeza los dulces, está agradecida porque logró cambiar su cuerpo. 

Su programa de entrenamiento incluye trabajo con pesas, y admite que jamás pensó que la ayudarían a bajar de peso, El cambio fue tan notorio que en su trabajo se preocuparon y le empezaron a preguntar si se estaba alimentando bien. 

Ella les aseguraba que comía más que nunca y les respondía con una sonrisa de felicidad. Según confiesa, tiene el cuerpo y la confianza en sí misma que siempre había soñado.

¿Qué es un atracón nocturno?

Es uno de los desórdenes alimentarios incluidos en el Manual de diagnóstico y estadística de la Asociación Americana de Psiquiatría, más conocido como DSM-5. Los atracones se dan cuando alguien pierde el control sobre lo que ingiere, y como esta conducta produce culpa o angustia, se sigue comiendo. 

En el caso del atracón nocturno, quien lo padece se levanta varias veces durante la noche. Esto puede llevar a que se consuman en poco tiempo más de la mitad de las calorías diarias necesarias. Este hábito modifica el reloj biológico y causa irritabilidad, tristeza, culpa y riesgo de obesidad.

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