Hombres prefieren sexo a comida

Desde siempre, se dice que en el cerebro del hombre el sexo ocupa un lugar preferencial. Está en el imaginario popular, en las anécdotas, en los films, en síntesis, se da por sentado para la mayoría de la gente. Las mujeres en cambio, serían más golosas, sucumbiendo ante una buena comida como primera elección.

En una reciente encuesta realizada por el equipo del Dr. Oz, el 34% de las mujeres aseguró que la comida les interesa más que su vida sexual.

Hombres prefieren sexo a comida
| Foto: SHUTTERSTOCK

Hay evidencia científica del tema: una investigación realizada por la Universidad estatal de Ohio reveló que los hombres pueden pensar en el sexo más a menudo que las mujeres, pero también piensan en otras necesidades biológicas como comer y dormir, también con más frecuencia que las mujeres. Se halló que ellos piensan en el sexo casi 19 veces al día, mientras que las mujeres lo hacen 10 veces diarias, casi la mitad.

La frecuencia con que hombres y mujeres piensan en las relaciones sexuales son diferentes, y también quedó demostrado en otro amplio estudio del Kinsey Institute sobre hombres y mujeres de entre 15 años en adelante: concluyeron que el 54% de los hombres piensan en el sexo todos los días, mientras que las mujeres lo hacen en un 19%.

Para aportar más datos sobre la tendencia de los géneros en cuanto a la actividad sexual, un equipo de científicos de la Universidad de Rochester estudió el comportamiento de una especie de gusanos llamados C. elegans, y econtraron que también tienen prioridades muy diferentes.

Ellos ubicaron a los machos de C. elegans y a las hembras delante de la comida y a la vez, en compañía de una pareja, y pudieron observar cómo una y otra vez, las hembras se acercaban primero al plato de comida, pero los varones ignoraban el alimento y preferían aparearse, de acuerdo con el estudio publicado en Current Biology.

La razón de que machos y las hembras respondieran de manera diferente a su comida o a su compañero, fue debido a una diferencia en la biología de sus cerebros.

Sin embargo, en gusanos machos muertos de hambre, la necesidad de alimentos superó a la necesidad de tener sexo, pero sólo en esos casos, expresaron los científicos en sus conclusiones.

Diferencias a nivel cerebral

La diferencia biológica del cerebro fue clave en las preferencias de los sexos, y una vez que los científicos identificaron que los receptores llamados ODR-10 eran los culpables, decidieron alterarlos tanto en machos como en hembras, y obtuvieron comportamientos totalmente opuestos.

El comportamiento observado con este estudio puede ser  proyectado en los seres humanos y estudiado en profundidad en más investigaciones, pero los resultados  sugieren que la expresión genética a nivel cerebral puede desempeñar un papel más importante de lo que se creía, tanto en las elecciones como en el comportamiento en general.

Comprender las diferencias neurológicas específicas de cada género podría hacer mucho más que explicar lo mucho que un individuo piensa en el sexo: podría ayudar a entender por qué algunas condiciones, como el autismo, tienen una incidencia diferente entre los dos sexos, según expresaron los científicos en la publicación.

Comparte tu opinión