Quieren vaginas que huelan a durazno

Dos científicos de San Francisco, Austen Heinz y Gilad Gome desarrollaron una sustancia para que la vagina de las mujeres tenga olor a frutas. Los investigadores presentaron su producto recientemente en una conferencia de DEMO, organizada por las empresas IDG en San José, California. IDG busca tecnologías innovadoras y nuevos productos en Estados Unidos, China. Brasil, Rusia y Vietnam. 

Heinz y Gome quisieron demostrar que algunos olores se pueden cambiar modificando la biología de los intestinos tras consumir una sustancia probiótica. Para producirlo se utilizaría la tecnología provista por el laboratorio Cambrian Genomics que permite imprimir la información del ADN. 

Quieren vaginas que huelan a durazno
| Foto: SHUTTERSTOCK

Los inventores planean desarrollarlo tras reunir fondos a través de la plataforma Tilt. En un inicio recurrieron a Kickstarter, que en otras ocasiones les ayudó a financiar otros proyectos científicos. 

Pero este portal tiene un reglamento estricto sobre los proyectos de biología sintética porque los considera muy controversiales. “No querían involucrarse con este tema y no los culpo: muchos gobiernos del mundo encuentran muy complicada la regulación en este campo”, declaró Heinz.

Heinz y Gome sostienen que con este invento se podrá a la vez modificar el olor y también prevenir infecciones bacterianas y algunas otras complicaciones de la salud. Según ellos, “ayudará al fortalecimiento personal de las mujeres”. 

Sin embargo, este comentario ha provocado mucho revuelo entre el universo femenino, y desde una gran cantidad de artículos manifiestan que el olor poco tiene que ver con el fortalecimiento personal. 

Según declaro Heinz en su presentación, no todos los olores del cuerpo humano les son propios, sino que algunos son causados por “criaturas” que habitan en él. Y es un derecho del ser humano conocer el código genético de quienes habitan en su interior, para decidir qué hacer con ellos. 

Los inventores eligieron la esencia de durazno por pedido de la dueña de la idea Audrey Hutchinson, una joven de 20 años quería ayudar a que la mujer se conecte más y mejor con sus genitales. 

Según los expertos que colaboraron con ella, es fácil cambiar un aroma corporal mediante un suplemento probiótico que actúe directamente en el microbioma de los intestinos. Este producto también ayudará a prevenir infecciones y otros problemas de salud que provocan los microorganismos.

Mientras aguardan que empiecen a llegar los fondos, están trabajando con Petomics, un probiótico dirigido a gatos y perros para que sus deposiciones tengan aroma a banana.

Comparte tu opinión