Un vacío se ha sentido desde que murió Cory Monteith a causa de una sobredosis de alcohol y drogas. Tanto el público como los mismos compañeros de trabajo de Monteith se sienten devastados.
Puntos clave
El duelo o luto, según explica la Biblioteca Nacional de Salud, es una reacción a una pérdida grande o tragedia y con mayor frecuencia es una emoción dolorosa e infeliz que normalmente tiene una duración determinada.
El duelo, se puede desencadenar por la muerte de un ser querido, como el caso de Monteith. No obstante, las personas también pueden desarrollar aflicción si tienen una enfermedad incurable o una enfermedad crónica que afecte su calidad de vida.
Todas las personas experimentan la aflicción a su manera, pero hay etapas comunes para el proceso del duelo, que comienza con el reconocimiento de la pérdida y continúa hasta que finalmente se acepta. Según las circunstancias de la muerte la respuesta de la persona a la aflicción será distinta.
Una manera de describir este proceso es mediante cinco etapas, las cuales no se presentan en un orden y no la experimentan todas las personas: 1) negación, aturdimiento e incredulidad, 2) ira, culpar a otros, 3) hacer promesas, 4) estado de ánimo depresivo, tristeza y llanto, y 5) aceptación.
Ante el triste momento por el que está pasando el staff de Glee, Ryan Murphy, quien es productor ejecutivo de la serie, ha decidido que su equipo de trabajo reciba dos semanas de terapia para hacer frente a la pérdida de Cory.
“Lea (novia de Monteith y también parte del elenco de Glee) sintió que lo mejor para el reparto y el equipo era estar juntos y hablar de nuestros recuerdos sobre él”, comentó Murphy a E!.
La familia y los amigos pueden ofrecer apoyo emocional durante un proceso. Algunas veces, los factores externos pueden afectar el proceso de aflicción normal y las personas podrían necesitar ayuda de religiosos, especialistas en salud mental, grupos de autoayuda y trabajadores sociales.
La fase aguda de duelo y aflicción generalmente dura hasta dos meses, pero algunos síntomas más leves pueden durar un año o más. La asesoría psicológica puede ayudarle a una persona a enfrentar la pérdida.
La pérdida de un ser querido también puede afectar la salud en general y puede llevar a la depresión o al consumo excesivo de alcohol o drogas. El duelo que dura más de dos meses y es tan grave que interfiere con la vida diaria puede ser un signo de tristeza complicada y una enfermedad más seria, como la depresión grave.
Dado que es una respuesta saludable a una pérdida no se puede prevenir. En lugar de esto, el Instituto Nacional de Salud sugiere respetar. Aquellas personas que estén afligidas deben tener apoyo que las ayude a lo largo del proceso.
La clave para salir adelante
La resiliencia es el proceso de adaptarse bien ante la adversidad, el trauma, la tragedia, es decir, resurgir ante las experiencias difíciles. De acuerdo con algunas investigaciones todas las personas demuestran resiliencia, lo que no quiere decir que la persona no experimente dificultad o dolor.
Algunos factores asociados a la resiliencia incluyen la capacidad para hacer planes realistas y caminar los pasos necesarios para llevarlos a cabo. Una visión positiva de sí mismos y confianza en sus fortalezas y habilidades, así como destrezas de comunicación y solución de problemas.
Haz buenas relaciones con la familia, amistades cercanas y otras personas relevantes. Evita ver las crisis como problemas insuperables. Muévete hacia tus metas. Toma acciones decisivas. Acepta el cambio como parte de tu vida y busca oportunidades de auto-descubrimiento. Informó el Instituto Nacional de Salud.