En este contexto muchos se lanzan a la búsqueda de una droga maravillosa que desencadene de manera armoniosa y placentera el disfrute.
Facilitador en lugar de potenciador
Por su parte, el mercado está saturado de productos que ofrecen maximizar el rendimiento sexual, lo cual es más que nada un efecto placebo. El enfoque de potenciador sexual es equivocado, el término que deberíamos, usar es de un facilitador para la relación sexual, ya que está en su mayor parte depende de la libido de los seres humanos, es decir la parte del cerebro que se dedica a las funciones químicas de la atracción sexual.
Puntos clave
- Habría que hablar de facilitadores más que de potenciadores sexuales.
- La mayoría de los remedios para incentivar el placer sexual son placebos.
- Los problemas de la sexualidad en su mayoría tienen un origen psicológico, como lo es la eyaculación precoz, o la anorgasmia de la mujer.
El famoso Viagra
Los hombres generalmente o erróneamente piensan que el uso de los medicamentos para facilitar la erección mejorarán su actividad sexual, lo cual es falso ya que este tipo de medicamentos solo debe de usarse en casos específicos de impotencia masculina.
Lo que hacen estos medicamentos es inducir el oxido nitroso a nivel del pene para hacer una vasoconstricción y retener la sangre que fluye hacia el pene para tener una erección sostenida, este medicamento como el viagra (sildenafil), se toma media hora antes de tener la relación sexual, pero es necesario que el hombre sea estimulado y atraído por su pareja, para facilitar la erección.
Los problemas de este medicamento es que pueden provocar una erección prolongada conocida como priapismo, la cual es muy dolorosa, y ocasiona también problemas de ansiedad. Las personas que no tienen impotencia no tienen necesidad de usarlo. También se usan bombas de vacío, inyecciones peneanas (prostaglandina E1), anillos de plástico que evitan el retorno venoso del pene para prolongar la erección y aun cirugías con prótesis intracavernosas.
El Viagra femenino
La mejor forma de tener una salud sexual ese que cada quien conozca su cuerpo y estimule las zonas erógenas del mismo, para esto bastará usar la imaginación.
Actualmente, se hace mucho énfasis en el Viagra femenino, que consiste en parches de testosterona, hormona masculina que también las mujeres producen en péqueñas cantidades en sus ovarios y en las glándulas suprarrenales.
Este tipo de terapia pretende estimular la líbido en la mujer y aumentar su apetito, sexual, se considera que para que esta tenga efecto tiene que ser usada con regularidad, pero los efectos de la testosterona sobre la mujer pueden tener efectos secundarios virilizantes, como lo es el (hirsutismo) crecimiento de vello facial.
El papel de la psicología
Cuando comprendemos que los problemas de la sexualidad en su mayoría tienen un origen psicológico, como lo es la eyaculación precoz, o la anorgasmia de la mujer, es necesario buscar mejores alternativas de apoyo psicoterapéutico, antes de caer en el engaño de productos milagrosos que potencian la actividad sexual.
Y dado a que el problema de la insatisfacción sexual ha aumentado por las condiciones de vida tan acelerada, en la cual todo lo queremos instantáneo, hasta el sexo, ha favorecido la aparición de estos medicamentos milagrosos, que en ocasiones es mayor su efecto placebo (lo cual es válido) que el otorgado por el beneficio del producto.
En conclusión podemos sugerir, que la mejor combinación para plenitud sexual será la comunicación, el conocer tu cuerpo y las zonas que deben ser estimuladas, y el no permitir egoísmos en la relación sexual, sino que la pareja atienda también las necesidades del otro y en caso de requerir una medicamento que favorezca la erección, utilizarlo pero con medida y no abusar ni depender de este medicamento.