¿Cuál es la misteriosa enfermedad en la embajada de EE. UU. en Cuba?

Describieron que escucharon ruidos altos y raros en sus hogares o habitaciones de hotel. Después, experimentaron síntomas de conmoción, como problemas de memoria y pensamiento, dolor de cabeza, mareo y problemas de equilibrio.

Pero la naturaleza exacta de lo que hizo daños a más de 20 miembros del personal del gobierno de EE. UU. destinados en La Habana, Cuba, el año pasado sigue siendo un misterio, reporta un equipo dirigido por el Dr. Douglas Smith, de la Universidad de Pensilvania.

¿Cuál es la misteriosa enfermedad en la embajada de EE. UU. en Cuba?
| Foto: ISTOCK

Lo único que se puede decir con certeza es que "identificamos un nuevo síndrome que podría tener importantes implicaciones de salud pública", afirmó Smith.

"Ninguno de los pacientes había sufrido ningún tipo de trauma contundente en la cabeza, pero los síntomas que describen y las evaluaciones demuestran que son sorprendentemente similares a los encontrados en el síndrome de conmoción persistente", anotó Smith, director del Centro de Lesión y Reparación Cerebral de la Universidad de Pensilvania, en Filadelfia.

Los informes de la extraña enfermedad de los diplomáticos de EE. UU. destinados en La Habana comenzaron a surgir a finales de 2016 y continuaron a lo largo de 2017, reporta el equipo de Smith en la edición del 15 de febrero de la revista Journal of the American Medical Association.

De los 80 miembros del personal de la embajada que fueron evaluados en la primavera de 2017, "se identificó a 16 individuos con un historial similar de exposición y un conjunto de señales y síntomas neurológicos" que por lo general se vinculan con la conmoción, aunque ninguno había sufrido una lesión en la cabeza, anotaron los investigadores. Con el tiempo hubo ocho casos más.

Panel de expertos

El gobierno de EE. UU. reunió a un panel de expertos para explorar el tema, y el panel "llegó al consenso de que lo más probable era que los hallazgos de la clasificación se relacionaran con un traumatismo neurológico a partir de una fuente no natural", y solicitó una investigación más amplia dirigida por el equipo de la Universidad de Pensilvania.

Las pruebas iniciales realizadas en la Universidad de Miami también mostraron que los síntomas se parecían a los de una conmoción. Entonces, se evaluó a los pacientes de forma más detallada en centros de la Universidad de Pensilvania, a partir del verano de 2017.

"En el nuevo estudio, el equipo de investigación de la Universidad de Pensilvania reporta que los pacientes experimentaron una amplia variedad de síntomas neurocognitivos, que incluyeron problemas con la memoria, la concentración, el procesamiento de la información y para encontrar palabras", según un comunicado de prensa de la universidad. "También fueron comunes reportes de problemas para enfocar la vista, de mareo y de equilibrio durante y después de los incidentes de sonido, y muchos pacientes sufrieron luego dolores de cabeza y problemas para dormir".

En total, más de 20 personas del personal diplomático de EE. UU. en La Habana han mostrado esos síntomas, concluyó el grupo de Smith.

Pero la naturaleza exacta de lo que provocó los síntomas (y si se relacionaba con los ruidos extraños que escucharon los pacientes antes) sigue sin estar clara. El equipo de investigación dijo "se sabe" que el ruido "en el rango audible causa una lesión persistente en el sistema nervioso central".

Los investigadores añadieron que unos escáneres cerebrales fueron mayormente inconcluyentes.

Y los científicos también dijeron que ciertos síntomas eran distintos de los de una conmoción clásica. Los pacientes desarrollaron dolor en un oído, o tinnitus ("zumbidos en los oídos) y problemas de equilibrio, y nada de eso es común tras una conmoción. La recuperación de algunos pacientes también fue mucho más lenta de lo que se observa en general con la conmoción.

Terapia

Sin embargo, el estudio tuvo un punto positivo.

"La buena noticia es que los síntomas parecen responder a las intervenciones de rehabilitación de forma similar a la observada en pacientes con síntomas persistentes tras una conmoción", dijo uno de los autores del estudio, el Dr. Randel Swanson.

"Aunque algunos pacientes reportaron que los síntomas desaparecieron solos sin tratamiento, la mayoría de los individuos tenían síntomas que no comenzaron a mejorar hasta que se iniciaron terapias dirigidas", añadió Swanson, profesor asistente de medicina física y rehabilitación en la Universidad de Pensilvania.

Dijo que, basándose en lo que se averiguó, se ha desarrollado un programa especial de rehabilitación para ayudar a los pacientes a recuperarse y a volver a sus trabajos.

Más información

Para más información sobre los síntomas de conmoción, visite la Academia Americana de Neurología (American Academy of Neurology).

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