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Una tribu amazónica podría tener la clave de la salud para los cerebros que envejecen

VIERNES, 28 de mayo de 2021 (HealthDay News) -- Una población nativa de Sudamérica que tiene un estilo de vida preindustrial quizá tenga una tasa de envejecimiento cerebral más lenta que el occidental típico, encuentra un estudio reciente.

El estudio se enfocó en la población tsimané, con unos 16,000 miembros que viven en una parte remota de la Amazonia boliviana. Viven de la agricultura, la caza, la recolección y la pesca, un estilo de vida en que la comida procesada, el sedentarismo y las plataformas de contenido están ausentes.

Una tribu amazónica podría tener la clave de la salud para los cerebros que envejecen

Investigaciones anteriores han encontrado que incluso los adultos mayores tsimanés raras veces sufren de las aflicciones comunes en la época actual, como la obesidad, la hipertensión, la diabetes y las arterias cardiacas obstruidas.

El nuevo estudio observó si a los tsimanés también les iba mejor en una medida de la salud del cerebro: la atrofia, o encogimiento, del tejido cerebral relacionada con la edad.

Según los investigadores, la respuesta es que sí.

En promedio, los adultos de mediana edad y mayores tsimanés mostraban menos atrofia cerebral en las TC que el nivel típico en los estadounidenses y europeos de su edad, mostraron los hallazgos.

Los resultados sugieren que su tasa de encogimiento cerebral podría ser más o menos un 70 por ciento más lenta.

Cierto nivel de atrofia cerebral es parte del envejecimiento, pero un declive más rápido se vincula con un aumento en los riesgos de demencia y discapacidades físicas.

El motivo de que los tsimanés parezcan conservar su volumen cerebral al envejecer no está claro. Pero su buena salud cardiovascular podría ser clave, según el investigador principal, Andrei Irimia, profesor asistente de gerontología, neurociencias e ingeniería biomédica de la Universidad del Sur de California, en Los Ángeles.

En general, los expertos creen que lo que es bueno para el corazón también es bueno para el cerebro: los estudios han encontrado que unos hábitos saludables (que incluyen al ejercicio regular, una dieta que tome en cuenta a la salud, y no fumar) se correlacionan con un riesgo más bajo de demencia.

Los tsimanés son la representación de esto: la actividad física está arraigada en su rutina diaria, a partir de una edad temprana. Sus dietas, señaló Irimia, son ricas en fibra y grasas insaturadas "buenas", pero bajas en azúcar, conservantes y grasa saturada.

Aun así, no era una conclusión obvia que los cerebros de los adultos tsimanés tendrían un mejor aspecto que los de los occidentales.

Esto se debe a que la población se expone a muchas infecciones a lo largo de la vida, y sus cuerpos tienden a tener unos niveles altos de inflamación, lo que podría acelerar la atrofia cerebral.

Para estudiar el tema, los investigadores reclutaron a 746 adultos tsimanés de 40 a 94 años, y los transportaron a la ciudad boliviana de Trinidad, para someterlos a TC del cerebro.

Estos resultados se compararon con los escáneres cerebrales de dos estudios anteriores de adultos de EE. UU. y europeos.

Pero aunque los tsimanés mostraron menos pérdida del tejido cerebral, no se puede dar por sentado que todo se debe a una mejor salud cardiaca, comentó Rebecca Edelmayer, directora sénior de implicación científica de la Asociación del Alzheimer (Alzheimer's Association).

Anotó que el estudio no midió la salud cardiovascular ni los marcadores de inflamación de los participantes, para ver si se correlacionaban con el volumen cerebral. Tampoco evaluó la memoria y las capacidades de pensamiento en sí de las personas.

Hay buenas evidencias que vinculan una mejor salud del corazón y los vasos sanguíneos con beneficios para el cerebro, apuntó Edelmayer, pero otros factores (desde las exposiciones ambientales hasta los genes) podrían también influir en el envejecimiento cerebral y el riesgo de demencia.

La Asociación del Alzheimer está financiando un ensayo clínico para evaluar si una combinación de medidas (dieta, ejercicio, actividades de estimulación mental y un mejor control de los factores de riesgo cardiaco) pueden ralentizar el deterioro mental en los adultos mayores que se cree que están en un mayor riesgo.

El Centro Médico de la Universidad de Rush, en Chicago, es uno de los centros participantes. Shannon Halloway, profesora asistente del centro, dijo que los nuevos hallazgos respaldan la idea de que lo que es bueno para el corazón es bueno para el cerebro.

Pero Halloway, cuya investigación se enfoca en el ejercicio, cree que los hábitos saludables podrían hacer más que fomentar el flujo sanguíneo al cerebro. Ha encontrado que los adultos mayores que son más activos de formas cotidianas, como por ejemplo en la jardinería y las tareas del hogar, tienden a tener un mayor volumen cerebral.

Cuando las personas son menos sedentarias "y se mueven por el mundo", dijo Halloway, quizá también tengan más oportunidades para la estimulación mental y social, y es posible que estos factores tengan algo que ver con los tsimanés.

Es poco probable que los estadounidenses se conviertan en cazadores-recolectores, pero pueden incluir hábitos saludables en su día a día. "Camine, y hable con sus vecinos mientras lo hace", aconsejó Halloway. "Haga la cena con sus seres queridos. Encuentre actividades de las que disfruta y que pueda mantener".

El estudio se publicó en la edición del 26 de mayo de la revista Journal of Gerontology, Series A: Biological Sciences and Medical Sciences.

Más información

La Asociación del Alzheimer ofrece consejos para respaldar la salud del cerebro.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Andrei Irimia, PhD, assistant professor, gerontology, neuroscience and biomedical engineering, University of Southern California, Los Angeles; Rebecca Edelmayer, PhD, senior director, scientific engagement, Alzheimer's Association, Chicago; Shannon Halloway, PhD, RN, assistant professor, community, systems and mental health nursing, Rush University Medical Center, Chicago; Journal of Gerontology, Series A: Biological Sciences and Medical Sciences, May 26, 2021, online

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