Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado

Sufrir diabetes tipo 2 en la juventud es particularmente nocivo, según un estudio


MARTES, 15 de diciembre de 2020 (HealthDay News) -- Mientras más joven se es cuando se desarrolla la diabetes tipo 2, más letal resulta, encuentra un nuevo análisis.

Sufrir diabetes tipo 2 en la juventud es particularmente nocivo, según un estudio

El estudio, que reunió los resultados de 26 estudios anteriores, reveló un patrón claro: mientras más jóvenes eran las personas cuando desarrollaron diabetes tipo 2, mayor era su riesgo de complicaciones como enfermedad cardiaca y accidente cerebrovascular (ACV).

Por cada año que se retrasó la diabetes tipo 2, el riesgo de enfermedades de los vasos sanguíneos se redujo entre un 3 y un 5 por ciento.

Los pacientes más jóvenes también estaban en riesgo de una muerte prematura: en general, por cada año adicional de edad en el momento del diagnóstico, las probabilidades de fallecer durante el periodo del estudio se redujeron en un 4 por ciento.

Los expertos dijeron que los hallazgos, publicados en la edición en línea del 14 de diciembre de la revista Diabetologia, no resultan sorprendentes. Mientras más tiempo vive una persona con la diabetes, más tiempo hay para que se acumulen las complicaciones.

Aun así, es probable que los resultados contradigan a lo que muchas personas preverían, señaló el Dr. Jeffrey Mechanick, director del Centro de Salud Cardiovascular de Mount Sinai Heart, en la ciudad de Nueva York.

En general, los adultos mayores se enfrentan a más complicaciones por las enfermedades que las personas más jóvenes, que están en una condición relativamente mejor, apuntó Mechanick, que revisó los hallazgos.

"Pero en el ámbito de la diabetes tipo 2, es distinto", dijo.

La diabetes tipo 2 surge cuando el cuerpo se hace resistente a los efectos de la hormona insulina, lo que provoca que los niveles de azúcar en la sangre se disparen. Con el tiempo, tanto la resistencia a la insulina como el azúcar crónicamente alto en la sangre pueden conducir a una variedad de complicaciones, lo que incluye a daños en los vasos sanguíneos.

"No es sorprendente que mientras más pronto se observe el inicio de la resistencia a la insulina y (el azúcar alto en sangre), más tiempo haya para que sucedan estos siniestros eventos", indicó Mechanick.

En Estados Unidos, más de 34 millones de personas tienen diabetes, y la inmensa mayoría tienen diabetes tipo 2, según la Asociación Americana de la Diabetes (American Diabetes Association).

En una época, la diabetes tipo 2 era una enfermedad sobre todo de los adultos mayores. Pero con la prevalencia siempre creciente de la obesidad, un importante factor de riesgo de la diabetes tipo 2, la enfermedad se diagnostica cada vez más en adultos más jóvenes, e incluso en adolescentes y niños.

Pero los pacientes más jóvenes tienden a subestimar su riesgo de complicaciones, según la Dra. Joanna Mitri, endocrinóloga del Centro de la Diabetes Joslin en Boston, y profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad de Harvard.

"Es importante que los jóvenes con diabetes tipo 2 hagan un seguimiento regular con sus proveedores, para optimizar sus factores de riesgo cardiovascular", planteó Mitri, que no participó en el estudio.

Esto, añadió, significa no solo controlar el azúcar en la sangre, sino también la presión arterial y el colesterol, así como perder peso cuando resulte necesario.

La Dra. Natalie Nanayakkara, endocrinóloga de la Universidad de Monash en Melbourne, Australia, dirigió el estudio.

"Los efectos tanto del envejecimiento como de la duración de la enfermedad podrían ser aditivos", planteó, "lo que resulta en complicaciones y muertes prematuras entre las personas diagnosticadas con diabetes tipo 2 a una edad más temprana".

Nanayakkara se mostró de acuerdo en que los pacientes más jóvenes deben controlar todos sus factores de riesgo cardiovascular a largo plazo. También dijo que los proveedores deben encontrar mejores formas de ayudarlos a lograrlo.

En el análisis, su equipo combinó los resultados de 26 estudios en que participó un total de más de 1.3 millones de personas de 30 países. Muchos de los estudios dieron seguimiento a las personas durante una década o más, y la edad promedio de los participantes abarcaba desde los 22 a los 67 años al principio.

En general, mientras mayores eran las personas cuando recibieron el diagnóstico de diabetes, mejor, mostraron los hallazgos.

Su riesgo de enfermedades relacionadas con el daño en los vasos sanguíneos se redujo en entre un 3 y un 5 por ciento por cada aumento de un año en la edad en el momento del diagnóstico. Esto incluyó a afecciones graves, como la enfermedad cardiaca, el ACV y la retinopatía, una enfermedad de los ojos.

Mechanick se mostró de acuerdo en que los pacientes más jóvenes con diabetes pueden cambiar esta trayectoria al controlar su azúcar en la sangre, peso, presión arterial y colesterol.

"Pero hay algo todavía mejor: creemos un ambiente más saludable para los niños", propuso.

La diabetes tipo 2 existe en un continuo, dijo Mechanick. Y cuando se diagnostica en adultos más jóvenes, la enfermedad con frecuencia se asocia con la obesidad infantil, además de los hábitos de dieta y ejercicio que se formaron a una edad temprana.

Los niños necesitan oportunidades de jugar y ser activos, añadió Mechanick, además de acceso a unos alimentos saludables, en la escuela y en casa.

Pero anotó que los adultos mayores que desarrollan diabetes no quedan exentos. Todo el que tiene la enfermedad puede desarrollar complicaciones, dijo Mechanick, y todos los pacientes deben usar la dieta, el ejercicio y los medicamentos para reducir esos riesgos.

Más información

El Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales de EE. UU. tiene más información sobre la diabetes tipo 2.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com


FUENTES: Natalie Nanayakkara, MBBS, PhD, endocrinologist, School of Public Health and Preventive Medicine, Monash University, Melbourne, Australia; Jeffrey Mechanick, MD, director, Center for Cardiovascular Health at Mount Sinai Heart, and director, metabolic support, division of endocrinology, diabetes and bone disease, Icahn School of Medicine at Mount Sinai, New York City; Joanna Mitri, MD, MS, endocrinologist, Joslin Diabetes Center, and instructor, Harvard Medical School, Boston; Diabetologia, Dec. 14, 2020, online

Comparte tu opinión