MARTES, 17 de enero de 2023 (HealthDay News) -- No es un secreto: la dieta estadounidense estándar es el origen de la epidemia de obesidad, y de muchas de las enfermedades asociadas.
Pero, ¿por qué es la comida estadounidense tan malsana? Lo malsano no es solo que los estadounidenses coman demasiado (y lo hacen), sino también que lo que comen es malsano: grasa, azúcar, sal y alimentos ultraprocesados.
Según las Directrices Dietéticas para los Estadounidenses, la dieta estadounidense promedio consiste de un exceso de sal, grasa saturada, granos refinados, calorías de grasas sólidas y azúcares añadidos.
Los estadounidenses también comen menos verduras, frutas, granos integrales, productos lácteos y aceites que lo recomendado. Casi un 42 por ciento de los adultos estadounidenses son obesos, muestran las estadísticas de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Un motivo podría ser que los alimentos saludables son con frecuencia más caros que los alimentos empacados. Los alimentos empacados tienen unas cantidades más altas de sal, granos refinados, azúcar y aceites malsanos que no son recomendados por las Directrices Dietéticas para los Estadounidenses. Los CDC anotan que la hipertensión y el colesterol alto provocados por consumir un exceso de sal son las principales causas de la enfermedad cardiaca y el accidente cerebrovascular (ACV). Las directrices actuales recomiendan consumir menos de 2,300 miligramos (mg) de sal al día, pero la mayoría de los estadounidenses consumen más de 3,400 mg al día, en promedio.
¿El culpable? Más de un 70 por ciento de la sal que los estadounidenses comen proviene de la comida empacada, procesada, comprada en tiendas y de restaurantes, señalan los CDC.
"La comida ultraprocesada está diseñada para activar el antojo y el deseo de estos alimentos, y la publicidad (que está en todas partes) refuerza estos deseos ansiosos", comentó recientemente Samantha Heller, nutricionista clínica sénior de Langone Health de la NYU, en la ciudad de Nueva York. "El ansia por alimentos ultraprocesados no es culpa de los consumidores. Pero depende de ellos reconocer la manipulación de las compañías de comida y asumir el control sobre lo que elegimos comer".
Elegir alimentos malsanos no solo provoca un aumento de peso: tener sobrepeso o ser obeso aumenta las probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2 Entre los adultos de EE. UU., 96 millones tienen prediabetes, según los CDC. La diabetes puede conducir a una mala circulación que resulte en amputaciones, y la enfermedad del azúcar en la sangre también se vincula con pérdida de la visión y enfermedad renal.
Además, los CDC advierten que una dieta malsana puede aumentar el riesgo de algunos tipos de cáncer. Consumir alimentos y bebidas malsanas puede conducir a afecciones crónicas que ponen a las personas en riesgo de al menos 13 tipos de cáncer, entre ellos el cáncer de útero, de mama en las mujeres postmenopáusicas, y de colon. El cáncer de colon también se asocia con el consumo de carne roja y procesada.
Según los CDC, parte del problema es el acceso a una comida saludable. Las personas están rodeadas de comida, pero gran parte de la comida no es saludable. Los supermercados tienen muchísimos pasillos de alimentos llenos de azúcar, sal y grasas malsanas. Apenas una fracción del espacio de los supermercados se dedica a las verduras, las frutas y los granos integrales saludables. La agencia señala que se necesita un mayor acceso a los alimentos saludables en las comunidades, el trabajo y la escuela.
El Comité de Médicos para una Medicina Responsable (Physicians Committee for Responsible Medicine) insta a las personas a cambiar a una dieta de origen vegetal rica en frutas, verduras y granos integrales. La dieta debe limitar los carbohidratos, la carne roja y los lácteos, enfatizan.
El Dr. David Katz, un especialista en medicina preventiva y del estilo de vida, y presidente de True Health Initiative, habló sobre la epidemia de obesidad entre los adolescentes de EE. UU., y afirmó que es una batalla que se ha estado luchando durante más de tres décadas.
"Dicho sin tapujos, esta es una vergüenza nacional, porque este problema tiene unas graves consecuencias, y podríamos resolverlo en cualquier momento en que en realidad nos comprometiéramos a hacerlo", declaró Katz hace poco.
Lo que se necesita es un cambio cultural y un compromiso con un estilo de vida más saludable. Las tasas de obesidad aumentan de forma imparable porque industrias enteras le sacan beneficios, apuntó.
"El problema empeora porque se invierten muchos más recursos en propagar el problema que en solucionarlo", lamentó Katz. "Por ejemplo, sabemos que tenemos un suministro de alimento de comida basura que es adictiva a propósito y que está diseñada para maximizar el consumo, pero realizamos recomendaciones inútiles sobre el 'control de las porciones' sin resolver la causa original".
Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com
