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Los adolescentes de EE. UU. beben y fuman menos, pero el vapeo y el uso de marihuana aumentan

MIÉRCOLES, 21 de septiembre de 2022 (HealthDay News) -- Menos adolescentes de EE. UU. beben alcohol y fuman hoy en día, pero la popularidad de la marihuana y del vapeo ha aumentado, en particular entre los jóvenes que tienen tiempo libre sin supervisión.

Estos son algunos de los hallazgos de un nuevo estudio que ha monitorizado las tendencias en el uso de sustancias entre los adolescentes estadounidenses durante los últimos 30 años.

Los adolescentes de EE. UU. beben y fuman menos, pero el vapeo y el uso de marihuana aumentan

Los investigadores encontraron que aunque el uso de sustancias en general se ha reducido con el tiempo, hubo dos excepciones notables: el consumo de marihuana, que ha estado aumentando poco a poco durante muchos años; y el vapeo de nicotina y marihuana, que se ha disparado en los últimos años.

La tendencia en el vapeo es particularmente llamativa, señaló el investigador principal, Noah Kreski, de la Facultad de Salud Pública Mailman de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York.

"Se disparó en apenas tres años", apuntó Kreski.

Entre 2017 y 2019, el porcentaje de adolescentes de EE. UU. que dijeron que habían vapeado nicotina en el mes anterior aumentó de un 7 a un 17 por ciento, encontraron los investigadores. El aumento relativo en el vapeo de marihuana fue incluso mayor, de poco más de un 3 por ciento a casi un 10 por ciento.

El uso de la marihuana también ha aumentado en general desde la década de los 1990, al contrario que el uso de otras drogas entre los adolescentes, como el tabaco y el alcohol.

El motivo no está claro a partir del estudio, pero unas normas sociales cambiantes respecto a la marihuana son una razón probable, según Kreski.

Pero no todos los adolescentes tienen las mismas probabilidades de consumo de sustancias. Resulta que la forma en que pasan su tiempo fuera de la escuela hace una gran diferencia.

Independientemente del tipo de uso de sustancias, las tasas más altas fueron entre los adolescentes que tenían un trabajo o que pasaban mucho tiempo con sus amigos, sin adultos cerca.

Por otra parte, el uso de sustancias menos común se observó entre los jóvenes que no socializaban mucho o que participaban en actividades estructuradas, como los deportes.

De hecho, los patrones cambiantes en la forma en que los jóvenes pasan su tiempo libre podrían ayudar a explicar el declive en la mayoría de los tipos de uso de sustancias, sugieren los hallazgos: en comparación con sus predecesores de la década de los 1990, los adolescentes actuales "fiestean" con menos frecuencia, y es menos probable que tengan un trabajo a tiempo parcial.

Más allá de esto, la educación y otros esfuerzos por prevenir el abuso de sustancias en los adolescentes han mejorado con los años, según Linda Richter, vicepresidenta de investigación y análisis de la prevención de Partnership to End Addiction, una organización sin fines de lucro.

Aun así, no resulta sorprendente que la popularidad del uso del vapeo y la marihuana haya aumentado, dijo Richter, que no participó en el estudio.

Apuntó que "las fuerzas de la comercialización y la normalización del cannabis [marihuana] y el vapeo han afectado a la población joven en los últimos años".

"Ahora, hay evidencias concretas de que la industria del vapeo se dirigió a los jóvenes en sus esfuerzos de mercadeo, a través de productos con sabores dulces, el diseño de dispositivos chéveres, y un mensaje persistente sobre un riesgo bajo", comentó Richter.

Añadió que la industria del cannabis está haciendo lo mismo, con productos de vapeo y comestibles que se mercadean como benignos.

Los nuevos hallazgos, que se publicaron en la edición del 21 de septiembre de la revista Substance Use and Misuse, provienen de un estudio en curso nacionalmente representativo, que monitoriza el uso de alcohol y drogas de los adolescentes de EE. UU. El equipo de Kreski se enfocó en más de 530,000 adolescentes que respondieron a las preguntas de encuesta entre 1991 y 2019.

A lo largo de 30 años, alrededor de un 27 por ciento de los jóvenes dijeron que habían consumido alcohol en el mes anterior, mientras que más o menos un 15 y un 13 por ciento dijeron que habían fumado cigarrillos o usado marihuana, respectivamente. Cerca de un 9 por ciento afirmaron que habían usado "otras drogas".

Pero los patrones difirieron con el tiempo: la mayor parte del uso de sustancias alcanzó su pico entre principios y mediados de la década de los 1990, y entonces se redujo, mientras que el uso de marihuana aumentó.

Hubo un factor constante: a lo largo del tiempo, los adolescentes que participaban en deportes y otros pasatiempos estructurados eran menos propensos a reportar el uso de cualquier sustancia, sobre todo si no socializaban mucho fuera de estas actividades.

Al contrario, los jóvenes que socializaban mucho sin supervisión en general tenían las tasas más altas de uso de sustancias: tenían de siete a nueve veces más probabilidades de reportar el uso de marihuana, fumar o consumir alcohol, que los adolescentes que dedicaban su tiempo libre a actividades estructuradas.

"Años de investigación muestran que cuando los jóvenes participan en actividades de las que disfrutan y que sienten que son significativas, tienen menos motivos para recurrir al uso de sustancias para aliviar su aburrimiento o buscar sensaciones", observó Richter.

Pero nada de esto significa que el tiempo libre sea malo, ni que los padres tengan que estar siempre vigilando a sus hijos.

"Los adolescentes necesitan libertad para crecer y explorar", aclaró Kreski. "Si los monitoriza de forma constante, quizá les prive de experiencias positivas".

Más bien, los padres deben sacar el tema del uso de sustancias, y comunicar a sus hijos que pueden acudir a ellos si tienen preguntas, según Kreski.

Richter se mostró de acuerdo. "Estos hallazgos no me indican que los padres deban programar un exceso de actividades para sus hijos", enfatizó.

Más bien, añadió Richter, apuntan a la importancia de que los padres "estén presentes para sus hijos".

"A pesar de lo que muchos padres piensan, sí siguen siendo una de las influencias más importantes en las actitudes y conductas de sus hijos cuando se trata del uso de sustancias", aseguró.

Más información

Partnership to End Addiction ofrece consejos para hablar con los adolescentes sobre el uso de sustancias.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com


FUENTES: Noah Kreski, MPH, data analyst, Columbia University Mailman School of Public Health, New York City; Linda Richter, PhD, vice president, prevention research and analysis, Partnership to End Addiction, New York City; Substance Use and Misuse, Sept. 21, 2022, online

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