Este contenido ha sido archivado y puede no estar actualizado

El 'slugging', una tendencia de TikTok, hace que la gente se cubra la cara de grasa

MARTES, 13 de septiembre de 2022 (HealthDay News) -- ¿Ocluir o no ocluir? Esta es la pregunta que se hacen millones de usuarios de TikTok, que recurren al gigante de las redes sociales buscando consejos e información sobre lo que se ha convertido en un fenómeno del cuidado de la piel "hágalo usted mismo".

El slugging implica untarse algún tipo de agente oclusivo (como vaselina o algún otro ungüento con base de petróleo) en la piel.

El 'slugging', una tendencia de TikTok, hace que la gente se cubra la cara de grasa

¿Cuál es el problema? Una nueva investigación advierte que la mayoría de los videos de TikTok enfocados en la práctica para reducir las arrugas no son médicamente fiables, y exageran los beneficios al mismo tiempo que restan importancia a los riesgos.

La meta del slugging, explicó la autora principal del estudio, Kyla Pagani, es "ayudar a humectar y fortalecer la barrera cutánea" entre los que sufren de resequedad, irritación o inflamación.

La idea no carece de fundamento médico, enfatizó Pagani, que realizó la investigación cuando era estudiante de medicina del Departamento de Dermatología del Centro Médico Beth Israel Deaconess, en Boston.

"He escuchado a algunos dermatólogos que dicen que es muy bueno, con la mayor frecuencia para resolver el eczema en las manos", añadió. "Sin duda tiene beneficios".

Pero también tiene desventajas potenciales, advirtió Pagani, por ejemplo aumentar las probabilidades de acné. Y dado que los sitios de redes sociales, como TikTok, ejercen una "fuerte influencia en la población más joven", ella y sus colegas deseaban ver si era probable que los más de mil millones de usuarios de la plataforma recibieran una perspectiva completa sobre lo que el slugging en realidad conlleva.

Para hacerlo, el equipo del estudio analizó el contenido encontrado en los principales 49 videos de TitTok en inglés sobre el slugging. Cuando la investigación comenzó, esos videos habían acumulado en conjunto más de 26.5 millones de visitas y casi 3.3 millones de "me gusta".

Pero al final, apenas un 37 por ciento de los videos fueron clasificados como educativos por los investigadores. Esto significaba que ofrecían una exposición razonablemente completa tanto de los beneficios potenciales del slugging (como una piel más suave e hidratada) como de las desventajas potenciales, como los poros cutáneos bloqueados y el acné.

Las fuentes de los videos fueron lo más importante. Por ejemplo, el equipo encontró que casi un 88 por ciento de los videos subidos por proveedores de atención de la salud eran educativos y equilibrados. Pero esta cifra se desplomó a apenas un 43 por ciento de los videos compartidos por "influyentes" enfocados en la belleza.

En general, los autores del estudio encontraron que alrededor de 6 de cada 10 videos resaltaban solo las ventajas del slugging, mientras que tan solo 2 de cada 10 mencionaban los riesgos posibles.

"Lo que encontramos no necesariamente fue información falsa, sino con frecuencia una falta de información", señaló Pagani. "Muchas veces, los riesgos simplemente no se incluyeron".

Más allá de un mayor riesgo de acné facial entre los pacientes tendientes al acné, Pagani apuntó que también hay un riesgo de que cualquier medicamento cutáneo tópico que se aplique antes del slugging en esencia quede atrapado bajo los ungüentos de petróleo, y que por tanto se absorba de forma más profunda, y durante periodos más largos, de lo deseado.

"Eso sí, el slugging es una de las cosas relativamente inocuas que se pueden encontrar en TikTok", reconoció Pagani. "Pero incluso en el caso de las tendencias de belleza que son sobre todo benignas, la esperanza es que los usuarios obtengan información precisa de fuentes fiables, una información respaldada por la ciencia y basada en datos e investigación. Porque otras tendencias o productos de belleza sin duda tienen el potencial de ser más dañinos que algo como el slugging".

Los hallazgos se publicaron en una edición reciente de la revista Clinics in Dermatology.

Este tema más amplio es lo que preocupa a Kelly Garett, director de la Facultad de Comunicación de la Universidad Estatal de Ohio.

"No es de extrañar que las personas acaben buscando información de salud en estos espacios digitales", comentó Garrett, y apuntó que las redes sociales son conocidas, fáciles de usar, y pueden ser una forma empoderadora de investigar.

Y los profesionales médicos no son los únicos proveedores de información de salud útil. "Por ejemplo, alguien que vive con un diagnóstico de cáncer también puede tener una perspectiva importante", dijo Garrett.

Pero el problema, anotó, es que "en las redes sociales, las metas de los creadores de contenido no siempre son obvias".

"Las publicaciones de los proveedores de atención de la salud con frecuencia buscan informar, pero otros creadores quizá estén más interesados en proveer entretenimiento, convencer a los consumidores de que compren algo, o tan solo generar tráfico para su contenido", apuntó Garrett. "Los consumidores que no comprenden bien las metas de los creadores pueden acabar también siendo engañados por el contenido".

Todo esto significa que es esencial que los usuarios de las redes sociales sean conscientes de los riesgos implicados cuando busquen información de salud en línea, aconsejó Garrett, que no participó en el estudio.

"El conocimiento básico sobre la información" lo es todo, anotó, lo que quiere decir que los que recurren a las redes sociales para la información de salud sepan que deben distinguir "entre los que hacen un esfuerzo de buena fe para ayudar a los demás a orientarse en cuanto a complejos temas de salud y los que están más preocupados en recibir atención que en estar en lo correcto".

Más información

Aprenda más sobre el slugging en la Clínica Cleveland.

Artículo por HealthDay, traducido por HolaDoctor.com

FUENTES: Kyla Pagani, BS, medical student, University of Massachusetts T.H. Chan School of Medicine, North Worcester; Kelly Garrett, PhD, director, School of Communication, Ohio State University, Columbus; Clinics in Dermatology, Aug. 9, 2022

Comparte tu opinión