A medida que el calor sube, la ropa empieza a acortarse. Las mangas pasan de ser largas a cortas, al igual que los pantalones y las polleras. En otras palabras, ¡queda al descubierto todo lo que tapamos en el invierno!
Sin embargo, es precisamente cuando sacamos nuestro guardarropas veraniego el momento justo para empezar la dieta y empezar a hacer ejercicio.
Según el Dr. Eleazar Lara-Pantín, Vicepresidente de Desarrollo de Productos de DrTango, Inc., para tener éxito “es necesario promover la variedad (de alimentos) para evitar la monotonía que lleva al fracaso de la mayoría de los regímenes para perder peso, como también no debe suspenderse de manera absoluta ningún alimento”.
Aunque lo que más quieren las personas con sobrepeso son resultados rápidos, los expertos aseguran que “lo que rápido se adelgaza, rápido se recupera”.
No obstante, hay dietas que aseguran que se puede adelgazar entre 2 y 4 libras por semana. Sin embargo, para los especialistas esto no es recomendable: “No se debe promover la pérdida de más de un kilo o dos libras por semana”, expresó el Dr. Eleazar Lara-Pantín.
5 tips rápidos, para ir despacio
Para iniciar hoy mismo un cambio en tu alimentación, la Lic. Ana Carolina López, consultora en Nutrición de MiDieta te da los siguientes consejos:
1. Sustituye los dulces y golosinas por fruta fresca. Si lo que buscas es comer algo dulce, las frutas son tus mejores aliadas. Además de satisfacer tu antojo, estarás llenando tus requerimientos de vitaminas, minerales y fibra. En el verano, ¡las frutas te refrescan!
2. Evita las frituras. Elige preparaciones a la plancha, al vapor, al carbón o al horno. Sólo con esto, estarás reduciendo la cantidad de grasa y calorías en tu alimentación.
3. Cambia tus bebidas azucaradas por opciones sin azúcar. Prefiere las bebidas gaseosas en sus versiones “light” u otros refrescos de dieta, que te aportan mucha hidratación, ¡pero nada de calorías!
4. Elige tus snacks con sabiduría. En vez de escoger chips fritos o nachos, prepara snacks saludables y bajos en calorías: palitos de zanahoria y apio con un dip bajo en grasa, pretzels, palomitas de maíz sin grasa, chips horneados de papa, o fruta fresca en trocitos.
5. Ponte en acción. El verano es una excelente época para ponerte una pantaloneta y una camiseta fresca y salir a ejercitarte al aire libre. Empieza por caminar o trotar, sal a montar bicicleta, juega pelota con tu familia, sal a pasear al perro, ¡busca excusas para ponerte en movimiento! Complementa tu actividad física con ejercicios focalizados para tonificar las áreas que más te interesan; por ejemplo, puedes empezar por hacer abdominales tres veces por semana.
Ahora que sabes qué hacer para recuperar tu figura, puedes empezar a buscar ese pantalón que hace tiempo no te entra. Pocas cosas producen tanto placer como volver a usar la ropa que creías que nunca más ibas a volver a ponerte.
