Para el equipo de Huseyin Nac, especialista en políticas farmacéuticas de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard, el ejercicio es un arma muy potente que puede llegar a salvar o alargar la vida de enfermos coronarios. “Creemos que se lo debería considerar como una alternativa viable, ya sea solo o combinado con una terapia con medicamentos”, explica Nac.
El equipo de expertos demostró que no hay diferencias significativas entre la capacidad de las drogas o la actividad física para reducir el riesgo de enfermedades coronarias o prediabetes. Los investigadores trabajaron con casos al azar de participantes con diabetes tipo 2, enfermedades coronarias reiteradas, accidentes cerebrovasculares reiterados y fallas cardíacas. La mayoria de los participantes recibió medicacion y a un grupo se le indicó hacer ejercicio. 
Puntos clave
- El ejercicio ayuda a combatir la depresión
- Reduce el riesgo de que se estrechen las arterias
- Con sólo 2,5 horas a la semana ya se notan los beneficios
Con solo 2,5 horas semanales de ejercicio moderado, ya se reduce un 14% el peligro de desarrollar una enfermedad cardíaca, aunque algunos estudios advierten que esto no es suficiente en el caso de pacientes diabéticos. Los CDC recomiendan a los adultos realizar al menos 150 minutos semanales de actividad aeróbica moderada o 75 de actividad intensa, y también sugieren que es efectivo el entrenamiento con pesas, 2 o más veces por semana.
Las enfermedades cardíacas son la mayor causa de muerte en los Estados Unidos, que se cobran 800,000 vidas al año. Y según estiman los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, al menos 200,000 de esas muertes por fallas coronarias se deben a una reducción del diámetro de las arterias, que afectan el normal flujo de sangre al corazón.
Según opinan los autores del estudio de Harvard, cuando los medicamentos aportan pocos beneficios, los pacientes deben saber que la actividad física puede tener un impacto positivo en el tratamiento de sus enfermedades. Por otra parte, hacer ejercicio y bajar de peso mejora la calidad de vida, reduce los riesgos de contraer otras enfermedades, baja el total de gastos médicos y reduce los niveles de depresión .
