En las cuestiones que tienen que ver con el amor, bajar de peso puede llegar a jugar una mala pasada. Un estudio reciente demostró que una relación romántica puede cambiar - y no siempre para bien - cuando solo uno de los dos integrantes baja de peso.
Lynsey Romo, profesora de Comunicación en la Universidad Estatal de Carolina del Norte, en Raleigh, coordinó un estudio con 21 parejas, y en la mayoría de los casos, el vínculo mejoró después de la dieta. La pérdida de peso en uno de los miembros de la pareja motivó al otro a seguir la misma conducta. 
Puntos clave
- Una mujer que bajó de peso regañó a su marido porque estaba gordo
- Otras parejas sienten celos de la nueva figura de su contraparate
- Algunas veces un miembro de la pareja alienta a su compañero a seguir adelante
Sin embargo, en algunas parejas se dio lo que la experta bautizó como “el lado oscuro de bajar de peso”, ya que algunos de los participantes sintieron como una amenaza la nueva figura de sus parejas. Tampoco aceptaban el nuevo estilo de vida saludable, ya que ponía de manifiesto que el propio… dejaba mucho que desear.
Otros participantes se quejaron de que después de la dieta, su pareja los había comenzado a regañar para que copiara esta conducta. Por ejemplo, una mujer, tras bajar 30 libras (13.6 kg) , llegó a cuestionar a su marido porque había subido bastante de peso con los años, y no hacía nada para remediarlo.
El estudio publicado en el journal Health Communication se realizó en parejas de entre 20 y 61 años, que respondieron a cuestionarios por separado, después de que uno de los dos había bajado de peso, ya sea con dieta, ejercicio o una cirugía bariátrica.
Las parejas que sacaron buen provecho de la experiencia, encontraron que podían llevar una vida más sana y se alentaban entre sí para bajar ambos de peso. Así la relación se volvió más positiva y se sintieron más cercanos emocionalmente.
Sean M. Horan, Ph.D., miembro del College de Comunicación de la Universidad DePaul, investigó la interacción de quienes mantienen una relación sentimental. En los trabajos titulados “Causas y Roturas Sentimentales” y “Razones para terminar una relación sentimental”, los investigadores Duck, Leine y Fitzpatrick detallan varias razones por las cuales una pareja decide terminar la relación.
La ruptura puede ocurrir porque uno de los descubre cambios en el otro que ve negativos. Otra causa es cuando la pareja tiene objetivos o valores incompatibles, o porque los integrantes no hacen esfuerzo por congeniar.
También puede ocurrir que surjan conductas que implican la pérdida de las libertades personales. O la ruptura puede provocarla el hecho de que uno de los dos se vuelva controlador o porque la relación sea restrictiva y frene el desarrollo personal. En definitiva, estos cambios ponen de manifiesto una distancia que termina por romper irremediablemente la pareja.
Con frecuencia ocurre que un miembro de la pareja baja de peso y el otro comienza a sentirse inadecuado. Por eso hay que tener mucho diálogo para ver qué piensa cada uno de esta nueva experiencia que involucra a los dos. En definitiva, siempre se pueden llegar a poner de acuerdo, ya que nunca está de más, ni hace mal, comer más sano y hacer ejercicio.
