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Essiac®

Resumen:

El producto Essiac® contiene una combinación de hierbas, entre las que se incluyen las siguientes: raíz de bardana (Arctium lappa), acederilla (Rumex acetosella), corteza interna de olmo resbaladizo (Ulmus fulva) y ruibarbo turco (Rheum palmatum). Una enfermera canadiense de nombre Rene Caisse (1888-1978) desarrolló la fórmula original en los años veinte (de hecho, el nombre essiac obedece a la palabra Cassie al revés). Se dice que la receta se basa en un remedio tradicional de la tribu Ojibwa (tribu indígena de Estados Unidos) y Caisse administró la fórmula por vía oral y en inyección a muchos pacientes que padecían de cáncer durante los años comprendidos entre 1920 y 1930. Los ingredientes y cantidades exactas de la formulación original siguen siendo un secreto.

Durante investigaciones que el gobierno canadiense y audiencias públicas realizaron a finales de los años treinta, no estaba claro si Essiac® era un tratamiento efectivo para el cáncer. En medio de las controversias, Caisse cerró su clínica en 1942. En los años cincuenta, Caisse le entregó muestras de Essiac® al Dr. Charles Brusch, fundador del Brush Medical Center en Cambridge, Massachusetts, quien administró Essiac® a pacientes (no está claro si Brusch tenía acceso a la fórmula secreta). Según algunos relatos, a estas formulaciones posteriores se agregaron hierbas adicionales, entre las que se incluyen las siguientes: cardo bendito (Cnicus benedictus), trébol rojo (Trifolium pratense), kelp (Laminaria digitata) y berro (Nasturtium officinale).

Essiac®

Un estudio realizado en el Memorial Sloan-Kettering Cancer Center probó muestras de Essiac® (que Caissie había suministrado) en ratones durante los años setenta. La investigación nunca se publicó formalmente y existen controversias con respecto a los resultados de la misma, puesto que algunos relatos no señalan ningún beneficio y otros reportan efectos significativos (dentro de estos relatos se incluye uno del Dr. Brusch). Más tarde, surgieron interrogantes sobre la inapropiada preparación de la fórmula. Posteriormente, Caisse rechazó las solicitudes de investigadores del Memorial Sloan-Kettering y del National Cancer Institute de EE.UU. de tener acceso a la receta.

En los años setenta, Caisse suministró la fórmula a Resperin Corporation Ltd., con el conocimiento de que esta corporación coordinaría un ensayo científico en seres humanos. Aunque este estudio se inició, el mismo se suspendió pronto en medio de interrogantes sobre la inapropiada preparación de la fórmula y el inadecuado diseño del estudio. Esta investigación nunca concluyó. Resperin Corporation Ltd., que era la dueña del nombre Essiac®, entró en bancarrota después de transferir los derechos del nombre Essiac® y vender la fórmula secreta a Essiac Products Ltd., que es la empresa que actualmente distribuye los productos a través de Essiac® International.

Pese a la ausencia de evidencias científicas disponibles, Essiac® y los productos similares a éste (con ingredientes similares) siguen siendo populares, especialmente en las personas con cáncer. La forma más común de ingerir Essiac® es en forma de té. Una encuesta que se realizó en el año 2000 descubrió que aproximadamente 15% de las mujeres canadienses con cáncer de seno consumían Essiac®. Esto también se ha vuelto popular en pacientes con VIH y diabetes y en personas sanas por sus significativas propiedades en el mejoramiento del sistema inmunológico, aunque no existen investigaciones científicas confiables en estas áreas.

Existen más de 40 productos similares al essiac disponibles en Norteamérica, Europa y Australia. Flor-Essence® contiene las cuatro hierbas originales (raíz de bardana, acederilla, corteza de olmo resbaladizo y ruibarbo turco) como también hierbas que se agregaron más tarde como "potenciadotes" (cardo bendito, trébol rojo, kelp y berro). Virginias Herbal E® contiene las cuatro hierbas originales además de nuez de nogal negra y equinácea. Otras formulaciones de carácter comercial pueden incluir ingredientes adicionales como la uña de gato (Uncaria tomentosa).

Usos:

Los siguientes usos están basados en la tradición, teorías científicas o investigación limitada. A menudo no se han probado completamente en humanos y no siempre se han demostrado su seguridad y eficacia. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado. Podría haber otros usos propuestos que no están señalados a continuación.

SIDA/VIH, estimulante del apetito, artritis, asma, limpieza sanguínea, agente quelante (metales pesados), síndrome de fatiga crónica, desintoxicación, diabetes, incremento de energías, enfermedad de Hodgkin, mejoramiento del sistema inmunológico, enfermedades renales, longevidad, enfermedad de Lyme, suplemento nutricional, cuidado de apoyo a pacientes con cáncer avanzado, parálisis, reducción de efectos secundarios de la quimioterapia, lupus sistémico eritematoso, trastornos tiroideos, bienestar.

Evidencia:

Se han sometido a prueba los siguientes usos en humanos o animales. La seguridad y eficacia de los mismos no siempre se han demostrado. Algunas de estas afecciones son potencialmente serias y las debe evaluar un proveedor médico calificado.

  • Cáncer (C)

    No existen estudios de Essiac® para el cáncer en humanos que se hayan realizado de forma eficiente y se hayan publicado. Un laboratorio de Memorial Sloan-Kettering Cancer Center probó Essiac® en ratones durante los años setenta, aunque los resultados nunca se publicaron formalmente y siguen siendo controversiales. Surgieron interrogantes sobre la inapropiada preparación de la fórmula. A finales de los años setenta, en Canadá, se inició un estudio en humanos, pero éste se descontinuó debido a las preocupaciones sobre la preparación inconsistente de la fórmula y el inadecuado diseño del estudio. En los años ochenta, el Departamento de Salud y Bienestar de Canadá recopiló información de aproximadamente 86 pacientes de cáncer tratados con Essiac®. Los resultados eran inconsistentes (17 pacientes habían muerto al momento de realizarse el estudio; hubo información inadecuada en 8 pacientes; en 47 pacientes no se encontraron beneficios; 5 pacientes reportaron una reducción en la necesidad de los medicamentos para el dolor y un paciente mostró mejoría subjetiva). La mayoría de las personas recibieron, además, otros tratamientos para el cáncer, como la quimioterapia, por lo que fue imposible aislar los efectos del Essiac®. Actualmente, no existen evidencias suficientes para pronunciarse a favor o en contra del uso de esta mezcla de hierbas como terapia para algún tipo de cáncer. Las diferentes marcas pueden contener diferentes ingredientes y se desconoce la efectividad comparativa de estas fórmulas. Ninguna de las hierbas individuales que se usan en Essiac® se ha probado en ensayos rigorosos de cáncer en humanos (se ha mostrado que el ruibarbo tiene algunas propiedades antitumorales en experimentos realizados en animales; la corteza interna de olmo resbaladizo no lo ha demostrado; la acederilla y la bardana se han usado tradicionalmente en remedios para el cáncer). En Internet se encuentran disponibles muchos testimonios de pacientes individuales e informes de fabricantes, aunque no se puede considerar que estos reportes sean científicamente viables como evidencias. A las personas con cáncer se les aconseja no postergar el tratamiento con terapias que sean más consistentes. En Canadá, el Essiac® se ha convertido en un popular remedio herbal para la prevención o el tratamiento del cáncer del seno. También se toma comúnmente para mejorar la calidad de vida y manejar los efectos secundarios a los tratamientos contra el cáncer del seno. Sin embargo, la investigación en esta área es limitada; aunque la evidencia preliminar indica que el Essiac® puede ser inefectivo para mejorar la calidad de vida o los estados de ánimo en pacientes con cáncer de seno, se requieren estudios adicionales antes de ofrecer conclusiones firmes.

Seguridad:

Los profesionales de la salud que tienen instrucción formal practican muchas técnicas complementarias, de acuerdo con los estándares de organizaciones nacionales. No obstante, este no es el caso universal; es posible que se presenten efectos adversos. Debido a la limitada investigación existente, en algunos casos solamente hay poca información disponible sobre la seguridad del tratamiento.

Alergias

En la información científica que se ha publicado, no existen informes de alergias al Essiac®, aunque las personas con alergia a los miembros de la familia de las Astaráceas/Compuestas, tales como la ambrosía potencialmente pueden desarrollar reacciones a causa de cualquiera de las hierbas incluidas en este producto. Se ha reportado anafilaxis posterior a la ingestión de la hoja de ruibarbo y existen informes de reacciones alérgicas a los productos de acederilla al administrarse por vía oral. Se ha reportado dermatitis por contacto (brote en la piel posterior al contacto directo) por exposición a la bardana, corteza de olmo resbaladizo y hojas de ruibarbo. Puede ocurrir sensibilidad cruzada entre la bardana y los ,crisantemos, flor de caléndula y margaritas.

Efectos secundarios y advertencias

La seguridad del Essiac® no se ha estudiado bien en términos científicos. Las preocupaciones de seguridad se basan en reacciones conocidas y teóricas asociadas a los componentes de las hierbas de Essiac®: raíz de bardana (Arctium lappa), acederilla (Rumex acetosella), corteza de olmo resbaladizo (Ulmus fulva) y ruibarbo turco (Rheum palmatum). Sin embargo, la seguridad y las toxicidades de estas hierbas de forma individual tampoco se han podido estudiar bien. Varios productos similares al Essiac contienen ingredientes diferentes o adicionales y a los pacientes se les recomienda revisar con sumo cuidado las etiquetas del producto.

Dentro de los componentes potencialmente tóxicos presentes en Essiac®se incluyen los siguientes: taninos, ácido oxálico y antraquinonas. Los taninos, que se encuentran en la bardana, la acederilla, el ruibarbo y el olmo resbaladizo, pueden causar malestar estomacal y en altas concentraciones pueden provocar lesión en el riñón o en el hígado. En teoría, el uso a largo plazo de taninos puede aumentar el riesgo de cáncer de cabeza y cuello, aunque no existe ninguna información documentada de casos de seres humanos.

El ácido oxálico que se encuentra en el ruibarbo, olmo resbaladizo y acederilla puede causar serios efectos adversos si se toma en altas dosis (sobre todo en los niños). La toxicidad/envenenamiento por ácido oxálico puede estar asociada a náuseas, vómito, ardor en la boca/garganta, hipotensión peligrosamente baja, desequilibrio en los electrolitos, convulsiones, inflamación de la garganta que interfiere con la respiración y lesión en el hígado o en el riñón. Se han reportado muertes por intoxicación de ácido oxálico de un hombre adulto que tomó sopa que tenía acederilla y la de un niño de cuatro años de edad que ingirió hojas de ruibarbo. Se ha estimado que la dosis letal del ácido oxálico para adultos oscila entre 15 y 30 gramos, aunque las dosis de tan sólo 5 gramos pueden ser fatales. Se desconoce la cantidad de ácido oxálico en preparaciones del Essiac®. En casos de que se sospeche intoxicación por ácido oxálico, se debe buscar atención médica inmediatamente. La ingestión habitual de ácido oxálico puede aumentar el riesgo de cálculos renales.

Las antraquinonas en la raíz de ruibarbo o en la acederilla pueden provocar diarrea, calambres intestinales y pérdida de fluido y electrolitos (como potasio). El uso de ruibarbo puede producir decoloración de la orina (amarillo claro o rojo) o de la superficie de la mucosidad interior del intestino (afección que se conoce bajo el nombre de melanosis coli). Se ha reportado intoxicación por fluoruro con el uso del jugo de la fruta de ruibarbo. Los productos de ruibarbo que se fabrican en China se han contaminado con metales pesados. El uso crónico de productos de ruibarbo puede provocar dependencia.

Con base en investigaciones realizadas en animales y en estudios limitados efectuados en humanos, la bardana puede causar, ya sea aumento o reducción del nivel de azúcar en la sangre. Se deben tomar precauciones en pacientes con diabetes o hipoglicemia y en aquellas personas que toman drogas, hierbas o suplementos que afectan el azúcar en la sangre. Podría ser necesario que un profesional médico controle los niveles de glucosa sérica y ajuste los medicamentos. Se han reportado efectos diuréticos (aumento del flujo de la orina) y efectos similares al estrógeno con el uso de la bardana por vía oral en pacientes con VIH.

Según los reportes, se cree que las reacciones anti-colinérgicas (como bajo ritmo cardiaco y boca seca) por el uso de productos de bardana en los años setenta se debían a la contaminación de los alcaloides belladonna, los cuales se parecen a la bardana y se pueden introducir durante la cosecha. No se ha descubierto que la bardana contenga de forma directa constituyentes que sean responsables de estas reacciones.

Embarazo y lactancia

No existen suficientes evidencias científicas para recomendar el uso seguro del Essiac® o productos similares a éste durante el embarazo y la lactancia, y existen potenciales riesgos en las hierbas que estos productos contienen. El ácido oxálico y los glucósidos de antraquinonas en las hierbas que estos productos contienen pueden ser inseguros durante el embarazo. El ruibarbo y la bardana pueden producir contracciones en el útero. Algunas publicaciones han señalado que la corteza de olmo resbaladizo entera puede provocar el aborto, aunque no existen evidencias científicas que apoyen esta idea.

Las posibles interacciones:

Interacciones con drogas

Las interacciones del Essiac® no se han estudiado bien en términos científicos. La mayoría de las potenciales interacciones se basan en reacciones teóricas y conocidas que se asocian a los componentes de las hierbas de Essiac®: raíz de bardana (Arctium lappa), acederilla (Rumex acetosella), corteza de olmo resbaladizo (Ulmus fulva) y ruibarbo turco (Rheum palmatum). Sin embargo, no se han estudiado las interacciones de estas hierbas de forma individual. Varios productos similares al Essiac pueden contener ingredientes diferentes o adicionales y a los pacientes se les recomienda revisar con sumo cuidado las etiquetas de los productos.

El Essiac® puede interferir en la forma en que el cuerpo procesa ciertas drogas al usar el sistema enzimático P450 del citocromo del hígado. Como resultado, los niveles de estas drogas pueden aumentar y causar mayores efectos o reacciones potencialmente serias. Los pacientes que toman cualquier medicamento deben revisar la información al interior del paquete del medicamento y consultar con un profesional médico o un farmacólogo sobre las posibles reacciones. Esto se basa en el informe de un paciente de un estudio de investigación que consumía la droga experimental DX-8951f (la cual es metabolizada por CYP3A4 y CYP1A2), quien experimentó efectos secundarios tóxicos y la eliminación de la droga fue cuatro o cinco veces más lenta que en otros pacientes. Este paciente tomaba también "té de essiac"; aunque no hay mayores detalles disponibles y no está claro si el paciente tomaba Essiac® o un producto similar a éste.

Las antraquinonas en la raíz de ruibarbo o en la acederilla pueden provocar diarrea, deshidratación o pérdida de electrolitos (como el potasio) y aumentar los efectos de otros agentes laxantes. En un reporte de un estudio en humanos, la bardana se asocia a efectos diuréticos (mayor flujo de la orina) y en teoría, ésta puede causar una excesiva pérdida de fluido (deshidratación) o desequilibrios en los electrolitos (como cambios en los niveles de potasio o sodio en la sangre). Estos efectos pueden aumentar si la bardana se toma al mismo tiempo que se toman otras drogas diuréticas como clorotizida (Diuril®), furosemida (Lasix®), hidroclorotiacida (HCTZ) o espironalactona (Aldactone®). Las propiedades diuréticas y laxantes de las hierbas que se encuentran en Essiac® pueden provocar bajos niveles de potasio en la sangre, los cuales son potencialmente peligrosos para personas que toman digoxina o digitoxina.

Con base en investigaciones realizadas en animales y en un estudio limitado efectuado en humanos, la bardana puede disminuir o aumentar el nivel de azúcar en la sangre. Se deben tomar precauciones si se usan medicamentos que puedan afectar también el azúcar en la sangre. A los pacientes que toman drogas para la diabetes por vía oral o insulina los debe monitorear un profesional médico calificado. Podría ser necesario ajustar los medicamentos.

Con base en las evidencias limitadas en humanos que no son absolutamente claras, la bardana puede tener propiedades similares al estrógeno y puede actuar para aumentar los efectos de los agentes estrogénicos, entre los que se incluyen las terapias de reemplazo hormonal como Premarin® o pastillas anticonceptivas.

Essiac® puede también interactuar con los antibióticos, la enzima convertidora de angiotensina (ECA), los antiácidos, los corticosteroides, agentes para la regulación de la actividad cardiaca, o los agentes utilizados para el cáncer incluyendo la quimioterapia o la radioterapia. Essiac® puede aumentar el riesgo de daño al hígado o daño al riñón cuando se toma con otros agentes que también afectan a los riñones o el hígado.

La evidencia científica existente indica que Essiac® puede tener una interacción positiva cuando se utiliza con nifedipino, un agente utilizado para la hipertensión durante el embarazo, aunque se necesitan más estudios para confirmar esta observación. Pruebas de ensayos clínicos indican que la combinación de ruibarbo con agentes anti-psicóticos utilizados en el tratamiento de la esquizofrenia pueden ser prometedores.

Interacciones con hierbas y suplementos dietéticos

Con base en un informe en humanos, el Essiac® puede interferir en la forma en que el cuerpo procesa ciertas hierbas o suplementos al usar el sistema enzimático P450 del citocromo del hígado. Como resultado, los niveles de otras hierbas o suplementos en la sangre pueden llegar a ser muy altos. Esto puede alterar los efectos que posiblemente otras hierbas o suplementos tengan en el sistema P450.

Las antraquinonas en la raíz de ruibarbo o acederilla pueden producir diarrea, deshidratación o pérdida de electrolitos (como el potasio) y aumentar los efectos de agentes con posibles propiedades laxantes.

En un estudio realizado en humanos, la bardana se asoció a efectos diuréticos (mayor flujo de la orina) y en teoría, puede causar excesiva pérdida de fluido (deshidratación) o desequilibrios de electrolitos (como cambios en los niveles de sodio o potasio en la sangre) si se usa con otras hierbas diuréticas o suplementos.

Las propiedades diuréticas y laxativas de las hierbas en el Essiac® pueden provocar bajos niveles de potasio en la sangre, lo cual es potencialmente peligroso en personas que consumen hierbas que contienen glucósidos cardíacos.

Con base en investigaciones en animales y estudios limitados en humanos, la bardana puede disminuir o aumentar los niveles de azúcar en la sangre. Se deben tomar precauciones si se usa con hierbas o suplementos que puedan alterar el azúcar en la sangre. Los niveles de glucosa en la sangre pueden requerir monitoreo y podría ser necesario ajustar las dosis.

Debido a que la bardana posee químicos similares al estrógeno, se cree que ésta altera los efectos de otros agentes que tienen propiedades similares al estrógeno.

En teoría, el uso de ruibarbo y acederilla pueden disminuir la absorción de minerales como calcio, hierro y cinc.

Essiac® también puede interactuar con hierbas o suplementos con ciertos efectos, como antibacterianos, antiácidos, esteroides, o agentes para la regulación de la actividad cardiaca. Las pruebas existentes no están claras en cuanto a si Essiac® interactúa con agentes utilizados para el cáncer, y se recomienda precaución cuando se combina tratamientos. Essiac® puede aumentar el riesgo de daño al hígado o daño al riñón cuando se toma con otros agentes que también afectan a los riñones o el hígado. Algunos preparados contienen ingredientes añadidos, como el cardo bendito, trébol rojo o la uña de gato, que se cree que aumentar la eficacia de la fórmula original, pero no hay pruebas suficientes para apoyar esta observación.

Dosificación:

Adultos (mayores de 18 años)

Históricamente, se ha administrado Essiac® por vía oral o en inyección. El uso actual más común es en forma de té. No existen estudios de Essiac® o productos similares a éste realizados en humanos que sean confiables y se hayan publicado. Aún no se ha establecido la seguridad o efectividad en términos científicos de ninguna dosis. Las instrucciones para la preparación y la dosis del té varían de un producto a otro. A los pacientes se les aconseja leer las etiquetas del producto y consultar con el proveedor médico especialista en cáncer antes de iniciar alguna nueva terapia como Essiac® o productos similares a éste.

Las mujeres con cáncer de seno han tomado dosis bajas de Essiac® (dosis diarias totales de 43.6 ± 30.8 mililitros), siguiendo las indicaciones de las etiquetas de la mayoría de los productos de Essiac®.

Niños (menores de 18 años)

No existen suficientes evidencias científicas para recomendar el uso seguro de Essiac®, o productos similares a éste, en niños.

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No obstante se han estudiado de forma científica ciertas técnicas complementarias y alternas, para la mayoría de las terapias hay limitación o controversia sobre los datos de alta calidad respecto a la seguridad, eficacia y mecanismo de acción. Se recomienda, al máximo posible, que los practicantes cuenten con licencias expedidas por una organización profesional reconocida que se adhiera a normas claramente publicadas. Además, antes de iniciar una nueva técnica o contratar a un practicante, se recomienda que los pacientes consulten con su(s) proveedor(es) médico(s) principal(es). Se deben considerar atentamente los beneficios y riesgos potenciales (incluye los costos financieros) así como las alternativas. La siguiente monografía está diseñada para ofrecer una historia y un resumen de la investigación con orientación clínica, y la misma ni defiende ni se opone al uso de una terapia en particular.

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