Esta hierba semiparasitaria que crece sobre árboles, como el manzano, el roble, el arce, el olmo, el pino y el abedul, fue considerada antiguamente como una planta sagrada en la tradición celta.
Tiene gran fama y desde hace siglos se emplea para el tratamiento de enfermedades como la presión arterial alta, la epilepsia, agotamiento, ansiedad, artritis, dolor de cabeza, y vértigos (mareos). Pero sobre todo, se cree que puede ayudar a luchar contra el cáncer, y en muchos lugares de Europa se utiliza.
Los extractos de muérdago se preparan con soluciones a base de agua o soluciones de agua con alcohol.
Debido al gran interés que despierta el muérdago en el tratamiento del cáncer, y por la gran cantidad de información que circula, el Instituto Nacional del Cáncer (NIH) ha elaborado respuestas para las 5 preguntas más comunes sobre este tema, que se resumen a continuación.
1. ¿Cómo se administra el extracto de muérdago?
Por lo general, se hace mediante una inyección debajo de la piel (subcutánea). Otras maneras menos comunes de suministrar el muérdago son: oral (por boca), en una vena (intravenoso), en la cavidad pleural o sobre un tumor.
2. ¿Se realizaron estudios sobre el uso del extracto de muérdago en personas?
La mayor parte de los ensayos clínicos en los que se usó el extracto de muérdago como tratamiento del cáncer se llevaron a cabo en Europa. En casi todos éstos se utiliza el muérdago como terapia adyuvante para tratar a los pacientes de cáncer.
3. ¿Qué se comprobó en esos estudios?
En un estudio realizado entre 1993 y 2000, se analizó el uso prolongado de terapia complementaria con extracto de muérdago en 800 pacientes tratados con quimioterapia o radioterapia por un cáncer colorrectal. Y se encontró que quienes recibieron muérdago tuvieron menos efectos adversos, más alivio de los síntomas y mejor supervivencia sin enfermedad que aquellos que no recibieron ese complemento.
En otro estudio publicado en 2013, se analizó el uso del muérdago para tratar el cáncer de páncreas en estadío avanzado En 220 pacientes, se observó que aquéllos tratados con muérdago tuvieron mejor supervivencia y menos síntomas relacionados con la enfermedad (dolor, pérdida de peso, fatiga, náuseas, diarrea y ansiedad).
Las revisiones científicas de estudios sobre los beneficios del muérdago en pacientes con cáncer son mixtas. Una revisión sobre 26 estudios observó una mejor calidad de vida y más bienestar en los pacientes tratados con muérdago como complemento.
Pero hay otra revisión de 10 ensayos clínicos, en los que se emplearon extractos de muérdago en pacientes con diferentes tipos de cáncer, se midieron la calidad de vida y la supervivencia, y no se observaron diferencias entre los pacientes tratados con y sin muérdago como como complemento.
4. ¿Tiene efectos secundarios?
Se informaron pocos efectos adversos graves del uso de extracto de muérdago. Los más frecuentes son la inflamación y el dolor en el sitio de la inyección, dolor de cabeza, fiebre y escalofríos.
5. ¿La Administración de Drogas y Medicamentos de EE.UU. aprobó el muérdago para el tratamiento del cáncer?
La FDA no aprobó el uso del muérdago para el tratamiento del cáncer ni de ninguna otra afección.
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