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A moverse en verano

¿El frío atentó contra la rutina de movimiento? Piensa que pronto abrirás la ventana y un aire tibio te anunciará que el verano ya está llegando. Este es un momento ideal para tomar la decisión, acumula energía y ponte los tenis.

Pero antes, recuerda que la magia no existe: no sólo caminando unas millas o haciendo un par de abdominales lograrás modificar aquellos rincones de tu cuerpo que no te hacen feliz. Cuidado, porque solemos subestimar el tiempo que nos llevará ponernos en forma y el esfuerzo que implica. 

A moverse en verano

O no tomamos en cuenta ciertas complicaciones para mantener la actividad elegida, como distancia del gimnasio, organización familiar, cuestiones climáticas, etc. No caiga en la trampa de elegir un club lejísimos de su casa y luego desistir porque el viaje es muy cansador.

Para que el comienzo de tu rutina no sea un camino de ida al fracaso, la Sociedad Americana de Fisioterapia recomienda:

  • Infórmate sobre todas las posibilidades hasta  descubrir una actividad física que realmente te guste .Recuerda que la mejor actividad es aquella que tú puedas hacer .  

  • Ve despacio .Demasiado esfuerzo y demasiado rápido es uno de los errores más comunes: un pasaporte seguro para músculos doloridos y lesiones que afecten fuerzas y voluntad. Hay que gatear antes de caminar. La clave es crear el hábito del movimiento .

  • Deja las pesas para más adelanteComenzar con todo a la vez -ejercicio cardiovascular, entrenamiento de resistencia, bajar calorías- puede ser una barrera. Ya tendrás tiempo, unas cuatro semanas después de iniciar tu rutina, para incorporar las pesas.
  • Si tienes una bicicleta fija, desempólvala. Programa sesiones frente a la ventana, el televisor, con música, o proponte usarla cuando el mal tiempo le impida salir a caminar, por ejemplo. 
  • Arma tu rutina . No basta con decir que quieres estar en forma; es necesario diseñar un plan específico que incluya al ejercicio en tu vida como un hábito, similar al de lavarse los dientes. Establecer una actividad determinada en días y horarios fijos permite ser más consecuente que si nos manejamos con ideas como “cuando tenga un rato libre me siento en la bicicleta” o “si no estoy cansado esta tarde salgo a caminar”.
  • Encuentra un “socioEl apoyo de otros -acompañar en la actividad, cuidar a los chicos, que te reemplace en alguna tarea- facilita mantenerse a largo plazo.
  • Prepara con tiempo tu equipo de ropa, bolso y todo lo que necesitas para salir: evitará corridas de último momento, llegadas tarde, faltas y ganas de desistir. 
  • Entiende que bajar de peso o ponerse en forma lleva tiempo .Si fuera tan fácil como lo muestra la televisión, ¡nadie a nuestro alrededor tendría kilos de más!
  • Si el factor económico cuenta para ti, busca una actividad de bajo costo o gratuita. Existen, y los resultados pueden ser igualmente buenos. Elegir algo que te traiga dificultades para ser costeado puede ser un problema y no una solución.

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