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Siete mitos médicos que pueden matarte
Por pandalo@holadoctor.net
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Creencias populares
Hay mitos médicos que circulan en la sociedad y que pueden afectar seriamente tu salud. Tienen que ver con la juventud, con la omnipotencia de creer que nada te va a pasar, con la creencia de que lo natural cura todo... conócelos, para desterrarlos y cuidar tu salud con mayúsculas.
1. El chequeo anual es algo obsoleto
La doctora Nancy Snyderman, corresponsal médica de NBC y autora del libro "Medical Myths that Can Kill You" (Mitos médicos que pueden matarte) asegura que éste es el mito número uno. "Por años, el chequeo anual ha sido el estándar en el cuidado de salud. Pero el aumento en los costos alejó a muchas personas de estos exámenes esenciales", explica.
El chequeo médico anual es un exámen general, físico y de laboratorio, para ver cómo está la salud del paciente y, eventualmente, detectar algún problema. Incluye desde preguntas tales como si te proteges en una relación sexual hasta pruebas de sangre y orina para medir azúcar y colesterol, entre otros.
Médicos, a favor
Una encuesta del 2005 publicada en "Archives of Internal Medicine" reveló que el 65% de los médicos de cabecera considera que el chequeo anual es necesario. Esto aunque la US Preventive Task Force estipuló que las personas saludables no necesitarían hacerse un chequeo cada año.
Nada más alejado de la realidad, remarca la doctora Snyderman. La Asociación Americana del Corazón recomienda comenzar los chequeos cardíacos —pulsos, latidos, etc— a los 20 años y repetirlo cada dos años. Cada vez se ven más jóvenes con riesgo cardíaco y vascular.
Y las mujeres también
Aunque muchos piensan que es un mal de hombres, una de cada 3 mujeres muere cada año a causa de una enfermedad cardíaca, según la Asociación Americana del Corazón.
Falso. Hay vacunas que son esenciales para las personas adultas y hay una lista que dependen de factores como la edad, el estilo de vida, afecciones de alto riesgo, destinos y tipo de lugares adonde viajas y vacunas anteriores. Fuente: Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Lista esencial
Los CDC indican que éstas son las vacunas esenciales para los adultos: la de la influenza estacional; la triple que incluye tétanos, difteria y tos ferina para prevenir infecciones; la de la culebrilla; la de la enfermedad neumocócica, ambas para mayores de 60; y la del Virus del Papiloma Humano (VPH).
Hay 40,000 nuevos casos cada año de hepatitis B, una enfermedad que afecta el hígado y se puede transmitir por vía sexual. Y miles están infectados sin saberlo. La mejor prevención: la vacuna que se aplica en 3 o 4 dosis a lo largo de seis meses.
4. Los médicos atienden igual a todos
No siempre es así, especialmente en las salas de emergencia, cuenta Snyderman. Allí, hay tres niveles de pacientes: los que están en peligro de muerte, los de emergencia sin riesgo de muerte, y los menos graves. Pero cuidado, porque un médico puede pensar que se trata de un síntoma menor y no es así...
Por eso, es esencial que el mismo paciente, o la persona que lo acompaña, pueda contar bien los síntomas, por qué están en la sala de emergencia y, eventualmente, abogar por más exámenes. Hay casos en los que el paciente salió de la urgencia con una receta para un antiácido porque le dolía la boca del estómago y resultó ser un infarto...
5. Si estás deprimida... se te va a pasar
La mayoría de las personas tienden a ignorar esa tristeza y desgano persistentes porque no creen que están sufriendo un trastorno. Pero lo cierto es que el 7% de la población adulta sufre de depresión. Y las mujeres tienen un 70% más de riesgo de padecerla. Así lo indica el Instituto Nacional de Salud Mental.
Una idea muy femenina y que puede generar distintos grados de depresión y también fatiga crónica. Por eso, no hay que dudar en buscar ayuda. Hay sicoterapias y fármacos que ayudan a llevar una vida libre de este trastorno.
6. Natural es sinónimo de seguro
No siempre. Nuevos estudios están demostrando que los suplementos vitamínicos, símbolos de "lo natural", no cumplen con un rol preventivo como se creía años atrás. Y, de hecho, consumirlos en exceso puede ser contraproducente.
Es que el boom de los vitamínicos hizo que millones de personas tomaran las riendas de los tratamientos en sus manos. Y esto los perjudicó. Por eso, la recomendación número uno para superar al mito es consultar con el médico.
7. Estamos perdiendo contra el cáncer
Súper falso. Las nuevas técnicas de diagnóstico, tecnología y tratamientos han hecho que esta palabra, que abarca a decenas de distintos tipos de tumores y afecciones, ya no sea sinónimo de pronta muerte.
Borrando el cáncer
¿Cuál es la clave? El diagnóstico precoz. La Asociación Americana del Cáncer pronostica que habrá cerca de 900,000 nuevos diagnósticos de cáncer al finalizar el 2014. Pero muchos, hasta el 50%, serán tratables y curables.