Dietas y ejercicios al estilo Kardashian

En los últimos años, la figura de Kim Kardashian ha sido un tema de debate público. Su frente, su trasero, su figura en bikini, cuando estuvo embarazada. Tras nacer su hija North West. Las dietas son parte de su diario vivir.

A pesar de lucir una figura delgada, recientemente la protagonista del reality “Keeping Up with the Kardashians” se propuso la meta de bajar aún más de peso para lucir la figura que tenía en el 2009 donde pesaba 20 libras (10 kilos menos), para lo cual ha decidido poner su vida en manos de las fresas.

Y es que se ha encontrado que las fresas, gracias a su contenido de vitaminas, minerales y a su aporte calórico muy bajo, son uno de los alimentos que se incluyen en muchas dietas. Además, es diurética y eficaz contra triglicéridos y colesterol. Kim las consume por las mañanas y entre comidas se toma un batido.

Uno de los momentos más traumáticos para Kim llegó luego de haber dado a luz a su primogénita North en junio de 2013, cuando al pesarse en la báscula encontró que había subido alrededor de 60 libras (27 kg). Y aunque el reto de recuperar la figura parecía imposible, poco a poco volvió a ser la misma de antes.

Según declaró a través de su cuenta de Twitter, la ex chica Playboy recuperó su figura gracias a la dieta Atkins, un régimen que es bajo en carbohidratos, alto en proteínas y elimina las comidas procesadas. Las carnes magras, huevos, lácteos, vegetales y frutas frescas se incluyen en este menú.

En alguna ocasión, la estrella de la televisión comentó al Sunday Times que este régimen lo ha venido empleando desde hace mucho tiempo. “Quince años atrás probé la dieta de Atkins con mi padre y ambos bajamos bien rápido. Y aún sigo haciéndolo”, señaló.

Como parte del plan, la socialité llegó a comer hasta cinco veces al día en donde la carne de pescado y la de ave o vaca jugaron un papel importante. También consumió verduras de hoja verde y grasas saludables como nueces, palta y aceite de oliva. Al final, ella consumía de 1,800 a 2,000 calorías diarias.

Además, para lucir un vientre plano se comentó que Kim se inspiró en una anécdota de Jessica Alba, quien alguna vez dijo haber dormido con faja durante tres meses para obtener un vientre plano. Kardashian no se quedó con la duda y siguió esta idea, que mezclada con los abdominales le rindieron buenos frutos.

La parte física también jugó un papel importante, por lo que Kim, a las 5 semanas de dar a luz se puso los tenis y ropa deportiva para comenzar a entrenar en el gimnasio con un plan ideado por la entrenadora Tracy Anderson, quien la puso a ejercitarse 4 días a la semana.

Según declaró la propia Tracy a la agencia de noticias BANG Showbiz, el plan de entrenamiento se enfocó en que Kim fuera perdiendo peso gradualmente sin que descuidara la atención de su hija. “Le aconsejé que se relajara y que no hiciera comentarios que los medios estaban haciendo sobre su figura”.

De acuerdo con el Instituto del Corazón de Texas, los entrenadores personales que son reconocidos por un programa de certificación a nivel nacional han recibido la capacitación especial para llevar a cabo un buen trabajo de acondicionamiento. En base a tu complexión y metabolismo pueden crear un programa de ejercicio adecuado.

Sin embargo, la dieta Atkins y el ejercicio no es lo único que conoce Kim para bajar de peso. En alguna ocasión, uno de sus familiares ventiló que si luego es vista muy delgada es porque ha estado pasando mucho tiempo a solas junto a su esposo Kanye West. Ahora entendemos cómo se originó North West.

El sexo es una forma de ejercicio físico. De hecho, estudios sugieren que las pulsaciones durante el acto sexual aumentan de 70 por minuto a 150 lo mismo que le pasaría a un atleta durante su entrenamiento. Incluso, se ha encontrado que tener sexo tres veces a la semana permite quemar hasta 600 calorías y estar en forma a lo largo del año.

Y aunque su figura engalana las portadas de varias revistas, hay zonas en el cuerpo de Kim que aún necesitan ser más “pulidas”, como la de su trasero. De hecho, debido a la magnitud de éste varios medios especularon acerca que ella se habría inyectado aceites para darle más volumen, pero no, sólo se trata de grasa acumulada.

Existen varias rutinas sencillas. Una de ellas son las patadas de karate que consiste en pararse con las piernas abiertas, colocar manos en forma de puños bajo la barba, bajar como si estuvieras haciendo una sentadilla para después levantarte con una patada a la altura del ombligo.

Por otro lado, los tratamientos de belleza de Kim también han llamado la atención de todo el mundo. Uno de ellos es el de acupuntura, el cual consiste en la aplicación de agujas en varias partes del cuerpo con la intención de reducir dolores corporales, así como problemas en los órganos. Kim lo utilizó para inhibir el apetito.

En otra ocasión, la estadounidense recurrió a otro tratamiento, el cual se le conoce como “facial vampiro” y consiste en extraer sangre del paciente para después inyectarlo en su rostro. La finalidad de este trabajo es el de conservar la piel más joven.