Si usas tampones durante el período menstrual es importante que conozcas los principios básicos para utilizarlos de manera segura. Ten en cuenta esta importante información y compártela con tus amigas y familiares que usen estos productos, porque el uso indebido puede exponer a las mujeres a riesgos innecesarios.
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Los tampones tienen forma cilíndrica y están hechos de algodón, rayón o una mezcla de ambos. Están diseñados para insertarse con un aplicador de plástico, cartón, o directamente. Las fibras absorbentes usadas en los tampones que se venden ahora se fabrican con un proceso de blanqueo libre de cloro y sin los productos con niveles peligrosos de contaminantes.
Usa tampones sólo durante el período
Es importante utilizar tampones solamente durante el período menstrual y aplicarlos de la forma indicada. Recuerda, los tampones no deben usarse en ninguna otra ocasión.
No uses un mismo tampón durante más de 8 horas seguidas porque esto aumenta el riesgo de infección. Intenta cambiarlos cada 4 a 8 horas.
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Usa el tampón menos absorbente que necesites
Ten en cuenta qué tan abundante es el período y la frecuencia con la que necesitas cambiar el tampón. Si no necesitas cambiar el tampón en 8 horas porque no está lo suficientemente húmedo, quizá estás usando uno demasiado absorbente para ti.
Elige el que más se adapta
Considera el tampón que más se adapte a tu actividad. Por ejemplo, si por cierto motivo necesitas protección durante más de 8 horas, como para dormir, elige una compresa o toalla sanitaria, no un tampón.
Presta atención a síntomas inusuales
Informa al médico si alguna vez sientes o has sentido molestias, dolor u otros síntomas llamativos como una secreción inusual al tratar de colocarte o usar un tampón. Importante: Un tampón colocado correctamente no debe poder sentirse ni debe ser molesto.
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Conoce las alertas de tu cuerpo
Estos síntomas pueden significar que necesitas dejar de usar tampones por una temporada: fiebre súbita (38.9 °C (102 °F) o más), vómitos, diarrea, desmayos o una sensación como si fueras a desmayarte al ponerte de pie, mareos o una erupción cutánea parecida a una quemadura solar. Estos pueden ser indicios del síndrome de shock tóxico (TSS, por sus siglas en inglés).
Un problema de seguridad relacionado con el uso de tampones es el síndrome de shock tóxico, una enfermedad poco frecuente causada por una sustancia tóxica producida por ciertos tipos de bacterias. Esta sustancia puede causar daños a los órganos (incluida insuficiencia renal, cardíaca y hepática).
Si bien el síndrome de shock tóxico es poco frecuente en la actualidad, el riesgo es mayor si: usas tampones más absorbentes de lo necesario o utilizas un tampón durante más tiempo del recomendado. Recuerda seguir las instrucciones de seguridad impresas en el envase del tampón y ten en cuenta los consejos recién enumerados para mantenerte libre de riesgos.
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Consulta a tu médico
Si presentas alguno de los síntomas anteriores durante el período, quítate el tampón y solicita atención médica inmediata. Si tienes alguna de estas señales al poco tiempo de tener tu período, busca atención médica urgente. Si alguna vez tienes una reacción alérgica o irritación por usar tampones, deja de usarlos y habla con tu proveedor de atención médica.
Fuentes consultadas:
Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA), Biblioteca Nacional de Medicina de EE. UU., Clínica Mayo.
