Si te has puesto a dieta y llevas un plan de ejercicios, y aun así no logras adelgazar, tal vez hay factores inesperados que están influyendo. Conoce esas causas menos conocidas que te impiden restar libras y encuentra la forma de vencer a la balanza estancada.
1. No dormir bien
Si no descansas lo suficiente, tu cerebro te ordenará elegir las comidas más grasosas. No se sabe bien por qué, pero varios estudios hallaron que esta relación es real. Lo ideal es dormir entre 8 y 9 horas diarias.
El estrés podría anular los efectos saludables de los alimentos que eliges, llevándote a procesar los alimentos sanos como si fueran grasosos, sugiere un estudio de la Universidad Estatal de Ohio. Ese efecto es nulo entre las personas sin estrés, así que lo aconsejable es realizar un tratamiento.
La tiroides produce hormonas que controlan la forma en que cada célula del cuerpo usa la energía, es decir, el metabolismo. Por eso, cuando alguien padece de hipertiroidismo, uno de los síntomas frecuentes es el aumento de peso, según la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU. Habla con tu médico si tienes dudas.
El doctor Louis Aronne, del Programa de Control Comprensivo del Peso, en Nueva York, indica que Paxil, uno de los medicamentos muy utilizados para tratar la ansiedad, causa aumento de peso. Y el Prozac, para la depresión, también hace engordar, ya que desarrolla tolerancia a los mensajes de saciedad emitidos por el cerebro.
Según el doctor Aronne, el 5% de los estadounidenses tienen sobrepeso por causa de la medicación. A su vez cada vez hay más enfermedades como la diabetes, la depresión y el cáncer, y las drogas que se utilizan suelen causar aumento de peso, generando un círculo vicioso.
La mayoría contienen fexofenadina y pseudoefedrina. Como ocurre con otras drogas psiquiátricas, su acción antihistamínica puede causar suba de peso, ya que bloquea la histamina, enzima del cerebro que regula el consumo de alimentos.
Ocurre cuando los ovarios o las glándulas suprarrenales femeninas producen más hormonas masculinas de lo normal. Esto causa crecimiento de quistes en los ovarios, provoca dolores, ciclos menstruales irregulares y resistencia a la insulina, lo que lleva a un aumento de peso.
Hay algunas razones por las que la gente sube de peso cuando deja los cigarrillos, informa la Biblioteca nacional de Medicina de EE.UU. Por ejemplo, el cigarrillo reduce el apetito, calma la ansiedad y además, la nicotina acelera el metabolismo y quema más rápido las calorías cuando el cuerpo está en reposo.
8. Tomar esteroides y antihipertensivos
Algunos antiinflamatorios esteroides que contienen drogas como la prednisona, hacen engordar, explicó el Dr. Aronne. Y algunos fármacos contra la hipertensión que contienen la droga atenolol (Tenormin, Lopressor e Inderal) pueden agrandar la cintura.
9. Tener Síndrome de Cushing
Es un trastorno hormonal causado por la exposición prolongada a un exceso de cortisol, una hormona producida por las glándulas adrenales. Provoca aumento de peso en la parte posterior del cuerpo, mientras que brazos y piernas se mantienen delgados.
10. Padecer de ansiedad
En un experimento de la Universidad de Cambridge, se halló que muchas personas comen por estrés o ansiedad, es porque caen en una “trampa” que les tiende el cerebro. Cuando éste percibe que una persona está en problemas, provoca un aumento en la tasa cardíaca, y después de este episodio, el cuerpo necesita algo placentero como compensación, que suele ser comer algo rico.
Solución al tema de los fármacos
El doctor George Blackburn, de la Escuela de Medicina de Harvard sugiere pesarse a diario al empezar una nueva medicación. Si subes unas 5 libras (2,5 kg), consulta al médico para cambiar la droga o ajustar la dosis, y reducir la ingesta diaria de calorías.
Si tienes dudas...
Si crees que estás llevando una dieta equilibrada, has comenzado un plan de ejercicios, debes ser paciente. Pero si no logras adelgazar, consulta a tu médico. Podría ser por alguno de los motivos mencionados aquí: él te ayudará a encontrar las razones y a brindarte el tratamiento adecuado.