De qué mueren los escritores

El escritor colombiano falleció en la tarde del 17 de abril, en su casa ubicada en la ciudad de México. El 31 de marzo había sido internado por una infección en los pulmones y vías urinarias. Algunos medios aseguran que el cáncer linfático que le fue diagnosticado en 1999 de nuevo se habría hecho presente en su organismo.

De acuerdo con la Biblioteca Nacional de Medicina cuando alguien se somete a un tratamiento por cáncer linfático, como pasó con Márquez, es probable que algunas secuelas se reflejen mucho tiempo después, por ejemplo, podrían presentarse problemas pulmonares, como los que lo aquejaron hasta el final de sus días.

El escritor portugués es mundialmente recordado por varias obras que dejó como “El Evangelio según Jesucristo”, “Ensayo sobre la ceguera”, “Caín” o “La Caverna”. Su trabajo fue reconocido al ser galardonado con el premio Nobel de Literatura 1998. En junio de 2010 falleció a los 87 años a causa de leucemia.

El padecimiento que terminó con la salud del escritor portugués es un tipo de cáncer en la sangre que comienza en la médula ósea, el tejido blanco que se encuentra en el centro de los huesos, donde se forman las células sanguíneas. Esta enfermedad afecta en la producción de glóbulos rojos, plaquetas y glóbulos blancos maduros saludables.

El escritor argentino, quien es recordado por su obra de 1963 “Rayuela”, también fue víctima de la leucemia, misma que terminó con sus días el 12 de febrero de 1984. Existen algunas versiones que señalan que una transfusión sanguínea lo habría infectado con VIH.

El Instituto Nacional del Cáncer informa que en algunos casos la leucemia se puede tratar, mientras que en otros, sólo es posible controlarlo. Parte del tratamiento incluye quimioterapia, radioterapia y transplante de células madre. Si los síntomas desaparecen es necesario el tratamiento para prevenir una recaída.

Si hablamos de exponentes argentinos de la literatura, no podríamos pasar por alto a Borges, quien dejó un legado que se puede apreciar en obras como “El Aleph” y “El libro de la arena”. En junio de 1986, murió en la ciudad de Ginebra, Suiza, debido a un enfisema pulmonar y a un terrible cáncer hepático. Tenía 86 años.

Se trata de un tipo de Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) en donde los alveolos se dañan y como consecuencia, el cuerpo no recibe el suficiente oxígeno que necesita. Este problema también puede causar tos crónica y dificultades para respirar durante el ejercicio. La causa más común es el cigarrillo.

El escritor uruguayo, autor de más de ochenta libros de poesía, novelas, cuentos, ensayos, así como guiones de cine, falleció el 17 de mayo de 2009 a los 88 años de edad a causa de una insuficiencia renal. Previamente había sufrido problemas respiratorios, una descompensación general y una enterocolitis.

Cuando los riñones funcionan perfectamente son capaces de limpiar la sangre eliminando excesos de líquidos, minerales y desechos. Pero cuando están lesionados pueden acumularse desechos peligrosos en el organismo, puede elevarse la presión arterial y retener exceso de líquidos. Eso es conocido como insuficiencia renal.

En mayo de 2012 el escritor Carlos Fuentes se despidió de la vida. De acuerdo con su doctor personal Arturo Ballesteros, el autor de “La silla del águila” presentó una hemorragia del tubo digestivo, que le provocó una pérdida del estado de consciencia, a lo que más tarde se le agregó una insuficiencia respiratoria.

Según Ballesteros, esta hemorragia fue presentada por una úlcera, la cual es común en pacientes que toman aspirinas y antiagregantes plaquetarios por su padecimiento cardiovascular, como Fuentes. “Esto hace que las hemorragias sean sistemáticas, no son úlceras que tengan la manifestación habitual”, señaló.

A pesar de destacar en el mundo de las letras, “El maestro del relato corto”, como también se le conoce, vivió durante muchos años, 44, gravemente enfermo de tuberculosis, una enfermedad que contrajo de uno de sus pacientes a finales de 1880, ya que, además de escribir también fue un destacado médico.

Se trata de una infección bacteriana causada por un germen llamado Mycobacterium tuberculosis, el cual suele atacar los pulmones, pero también puede dañar otras partes del cuerpo, indican los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC). Se calcula que en EU 15 millones de personas tienen esta infección.

Conocido por ser un prolífico autor de obras de ciencia ficción, historia y divulgación científica, Isaac Asimov murió el 6 de abril de 1992 supuestamente por un fallo coronario y renal. Su viuda reveló en 2002 que su deceso fue debido al Sida, enfermedad que contrajo por una transfusión de sangre tras ser operado de bypass en 1983.

Se trata del síndrome de inmunodeficiencia adquirida, el cual es el estado más avanzado del virus de inmunodeficiencia humana (VIH), un virus que afecta directamente al sistema inmunológico y que afecta a 33 millones de personas en el mundo, según el Instituto de Educación al Paciente.

El poeta y ensayista mexicano, ganador del Premio Nobel de Literatura 1990 murió en abril de 1998 a los 84 años a causa del cáncer que desde hace años padecía. Varios de sus allegados describieron sus últimos días como “difíciles momentos de sufrimiento” pues también mostraba malestares en las articulaciones que lo alejaron de su público.

Es una de las enfermedades más mortales de los últimos tiempos. Consiste en el crecimiento desmedido de células, las cuales pueden llegar a formar tumores malignos. De acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer, existen 100 tipos de esta enfermedad y la mayoría de ellos se nombran por su lugar de origen.