10 cambios inesperados en tu cuerpo que dan miedo

Si notas que tu mano tiembla mucho cuando levantas un vaso de agua no es para que te espantes. Esto podría deberse a una afección inofensiva que se le conoce como temblores esenciales. “Estos temblores solo se limitan a temblores y no tienen otro síntoma neurológico”, explica el Dr. Eric J. Ahlskog, de la Clínica Mayo.

Mucha gente piensa que este tipo de temblores son síntomas del mal de Parkinson, sin embargo, en la mayoría de las ocasiones, están en un error. Generalmente, éstos últimos suceden en un estado de relajación, explica Ahlskog. Si presentas severos temblores lo más recomendable es que consultes a un médico.

¿Te ha sucedido que al estirarte, caminar o al hacer una pequeña flexión sientes un crujido en la rodilla, hombro y espalda? Si es así puede que esto te mantenga alarmado y el ruido que provoca esto puede sonar aterrador, sin embargo no hay nada de qué preocuparse ya que se trata de una simple función articular.

El fluido de las articulaciones (que actúa como lubricante) contiene gases como oxígeno, CO2 y nitrógeno. “Los cambios de presión dentro de la articulación hace que estos gases estallen dentro del fluido, creando un sonido de crujido o estallido, explica Jessica Matthews, fisióloga del American Council on Excercise.

El desplazamiento de los tendones como sucede en los movimientos articulares y la artritis también pueden causar un ruido de explosión. Si el dolor o la inflamación acompaña estos sonidos debes consultar a tu médico.

¿A quién no le resulta incómodo tener este malestar en el que no puedes controlar por completo el movimiento de tu párpado? Esta condición se le conoce como mioquimia y se le puede atribuir al estrés la fatiga o la falta de sueño.

El exceso de cafeína, las drogas, el alcohol, el exceso de tiempo en la computadora o una prescripción de gafas también puede contribuir a este problema. Los antihistamínicos pueden ser de gran ayuda. Si aparecen otros síntomas como un tic facial se recomienda consultar a tu médico.

¿Te ha pasado que cuando corres mucho tiempo o usas un calzado muy ajustado por mucho tiempo las uñas de tus pies comienzan a ponerse negras? Afortunadamente tampoco se trata de algo serio, simplemente es el resultado de los moretones y el sangrado interno.

“(Correr o caminar mucho) hace que la sangre se acumule debajo de la uña con cada paso. Por lo general es inofensivo, pero puede ser muy doloroso”, explica Matthews. Para que esto no te pase se recomienda usar un calzado que no sea muy ajustado.

Pequeños trozos de piel en el párpado o en otra parte del cuerpo se les conoce como papilomas cutáneos y en realidad se tratan de pequeños tumores benignos, según afirma la Dra. Debra Jaliman, quien es dermatóloga de Nueva York. Aún así, este tipo de problema no es para alarmarse en la mayoría de los casos.

“A menudo son genética y suelen ser inofensivos”, explica Jaliman. Este problema lo pueden presentar tanto hombres como mujeres por igual y si tienen problemas de obesidad aumentan más las posibilidades de su desarrollo.

Si de repente notas ciertas cuarteaduras en tus uñas que se extienden desde la cutícula hasta la punta de ésta, no entres en pánico, este problema se le conoce médicamente como onicorrexis. “Están provocados por la edad y no son un signo de alguna condición médica”, explica Jaliman.

De acuerdo con el libro “Uñas quebradizas: respuesta a la suplementación de biotina”, de Hochman LG, aproximadamente 20% de la población presenta uñas quebradizas. Mojar las uñas y secarlas frecuentemente, exponerlas a detergentes, agua y solventes fuertes podrían provocar varias lesiones en ellas.

¿Te ha pasado que al hacer un ejercicio con vigor tus músculos involuntariamente suelen contraerse? Este efecto es muy común y tiene que ver con la manera en que trabajan las fibras musculares. Al acercarse a sus límites el músculo, las fibras se contraen para seguir con el movimiento sin problemas.

A mucha gente le suele suceder que de repente entre su campo de visión nota como si existiera una mosca que vuela. “Estas ‘moscas voladoras’ suelen estar relacionadas por los cambios con la edad en la sustancia gelatinosa (vítreo) del ojo”, explica la oftalmóloga Sandy Feldman.

Este tipo de puntos se desarrolla cuando el vítreo se espesa y se contrae, lo que se produce durante una edad mediana. Éstos pueden aparecer como puntos, líneas onduladas, telarañas o círculos y son más visibles cuando se mira en un fondo plano.

Parece como si alguien hubiera recibido un golpe en el ojo, ya que se ve una mancha roja que a muchas personas suele preocupar. “Frotar el ojo demasiado, estornudar con fuerza y hacer mucho esfuerzo son las causas más comunes de que esto suceda” explica el Dr. Elio Polsinelli, de la Asociación de Optometría de California.

Una hemorragia subconjuntival es una condición inofensiva que sucede cuando se rompe un vaso sanguíneo en el ojo. Aunque parezca aterrador, está comprobado que no afecta la visión, afirma Polsinelli.

¿Te ha pasado que al sonarte la nariz, el pañuelo se mancha de sangre? Esto le ocurre a muchas personas en la temporada invernal pero no es para alarmarse, ya que hay muchos vasos sanguíneos que sangran fácilmente y más dependiendo el tipo de aire (frío-caliente) explica el Dr. Murray Grossnan.