Sharon Stone ¿se hizo cirugía estética?

En un vuelo que combinaba Los Àngeles con Nueva York, una cámara indiscreta capturó a Sharon Stone con un atuendo informal: jeans y sweater negro, campera de cuero y un gran bolso beige cruzado sobre el pecho en forma de bandolera. Todo esto sería normal para cualquier viajera, pero lo extraño del atuendo es que la actriz se había puesto una ancha vincha negra que cubría por completo sus orejas. 

Por debajo de esta vincha asomaba una extraña marca o cicatriz rojiza que podría estar indicando que tenía algún tipo de alergia. Otra posibilidad es que se haya sometido a una cirugía estética de rejuvenecimiento: si bien la protagonista de “Bajos Instintos” está radiante como siempre, los años fueron pasando. Y a decir verdad, Sharon está “demasiado bien” para los 56 años que acusa. 

Sharon Stone ¿se hizo cirugía estética?
The Grosby Group | Foto: THE GROSBY GROUP

Por eso es bastante probable que sea de esas personas que se deciden a ponerse en manos de un especialista para que le devuelva un rostro lozano como el de años atrás.

¿En qué consiste la cirugía estética facial?

La Biblioteca Nacional de Medicina de los Institutos Nacionales de la Salud de EE.UU. explica que la cirugía estética facial o lifting es un procedimiento que se realiza para reparar la piel caída o arrugada de la cara y el cuello. 

La intervención se realiza bajo sedación y anestesia local, y el cirujano hace incisiones por detrás del lóbulo de la oreja hasta la parte inferior del cuero cabelludo. Con frecuencia es un solo corte, pero hay distintas técnicas y los resultados son similares. 

Durante un estiramiento facial, el cirujano retira y "levanta" parte del tejido adiposo ubicado bajo la piel. También puede retirar o mover la piel floja, templar los músculos, realizar una liposucción para eliminar grasa y finalmente, cerrar las incisiones con puntos de sutura.

¿Qué modifica esta operación?

Según la Biblioteca Nacional de Medicina, la piel colgante o arrugada que llega con la edad es más notoria en el cuello y en la zona ubicada entre la nariz y la boca, donde puede haber pliegues y surcos. 

La genética, una dieta deficiente, el tabaquismo o la obesidad pueden hacer que los problemas cutáneos se presenten antes o sean más pronunciados. Y un estiramiento facial puede ayudar a reparar algunos de los signos visibles del paso del tiempo para dar una apariencia "más joven" y fresca.

Las personas se someten a una cirugía facial porque no están satisfechas con los signos del envejecimiento que se evidencian en su rostro. Pero para pasar por este tipo de operaciones es necesario que tengan una buena salud general ya que hay algunos riesgos, entre ellos problemas respiratorios y reacción alérgica a los medicamentos. 

Como en toda cirugía, también puede haber hemorragias o infecciones, además de otras complicaciones posibles pero no tan probables. Algunas de ellas son hematomas que requieran drenaje quirúrgico, daño temporal o permanente en algunos nervios que controlan los músculos faciales, dolor que tarda en desaparecer, entumecimiento u otros cambios de sensibilidad en la piel. 

Aunque la mayoría de los pacientes están contentos con los resultados de la cirugía, hay quienes no quedan satisfechos y recurren a una intervención adicional para lograr una nueva modificación facial. Algunos casos de disconformidad pueden deberse a la mala cicatrización, asimetría en el rostro, piel con contornos irregulares, cambios en el color de la piel o suturas muy notorias. 

Durante las primeras semanas puede haber una leve hinchazón en la zona de la cirugía. La mayoría de las cicatrices quirúrgicas están ocultas en la línea de implantación del cabello o las líneas naturales de la cara y se desvanecen con el tiempo. En general los puntos de la sutura se retiran a los 5 días de la intervención. Mientras tanto se puede usar maquillaje (¿o vinchas?) para disimular las secuelas de la cirugía. 

Comparte tu opinión