“En una cena de fiesta mexicana podemos ingirir más o menos la tercera parte de las calorías de los alimentos de todo el día. Estaríamos hablando de entre 1,800 y 2,000 calorías en una sola comida”, advirtió refirió el doctor Raúl Morín Zaragoza, presidente fundador de la Academia Mexicana para el Estudio de la Obesidad (AMEO).
En entrevista con HolaDoctor, Morín Zaragoza resaltó que el problema es que nuestro cuerpo ingiere muchas calorías en un breve período, por lo que se produce una sobrecarga alimentaria que favorece el aumento de peso.
El Dr. Morín recomendó que si los mexicanos van a participar en una cena por el grito de la independencia deberían empezar su día con un desayuno constituido por una fruta, un cereal y un yogurt, una comida muy ligera, que podría ser un caldo con mucha verdura, una ración pequeña de carne, una tortilla y agua, para que el tiempo fuerte sea la cena, una cena moderada.
En este sentido, Jesica Feria Chiquini, asesora en nutrición y Health Coach, en los Medifast Weight Control Centers, con sedes en México, Colombia y Estados Unidos, resaltó que las personas pueden elegir un delicioso pozole, pero con un perfil más saludable, con menos carbohidratos y bajo en grasa; por ejemplo, sustituir una parte del maíz por hongos portobello, con menos calorías y menos grasa, incluso se puede usar carne de pollo.
Morín Zaragoza hizó un llamado a hacer de la alimentación saludable una nueva tradición, para que el tradicional ¡Viva México! no sea un ¡Gordo México! o se refieran a los mexicanos con la letra de la canción: México lindo y que… gordo.
“Las cifras son claras, mejor dicho, son redondas y rotundas, de cada diez adultos mexicanos, siete padecen sobrepeso y de éstos siete, tres presentan obesidad. Y en los niños las cifras no son mejores, pues de cada 10 niños y niñas, 4 presentan sobrepeso y, de éstos, la mitad son obesos, añadió.
De continuar la actual tendencia de crecimiento en el número de niños y adultos con sobrepeso y obesidad, será muy difícil que México deje los primeros lugares mundiales de estos padecimientos. México ocupa el segundo lugar de los países con mayor índice de obesidad en su población con 30%, superado sólo por Estados Unidos, con 33.8%. Los países con menor índice de obesidad son Japón y Corea, con 4%.
Comer en forma desmedida puede provocar:
- Indigestión: Es una sensación de incomodidad o un ardor en la parte superior del abdomen. Se puede tener acidez o eructos y sentirse hinchado. También puede sentir náuseas e inclusive vomitar. La indigestión puede ser consecuencia de comer demasiado o demasiado rápido, ingerir alimentos grasosos o comer en momentos de estrés.
- Deshidratación o falta de líquido: Es una afección que ocurre cuando una persona pierde más líquidos que los que incorpora. Los platillos típicos de las fiestas patrias tienen un alto contenido en sodio, condimentos y grasa, que producen sed, irritación en el estómago y deshidratación. Además, beber alcohol tiene un efecto diurético y producción de orina aumenta en 10 ml por cada gramo de alcohol ingerido.
- Aumento rápido de peso: La oferta gastronómica de las fiestas patrias, contienen bastantes calorías y grasas, que se traducen en un aumento de peso. Platillos mexicanos como el pambazo, las tostadas de pata y el pollo con mole, tienen un inadecuado perfil nutricional que contribuye al aumento en el consumo de grasa, energía y proporciones inadecuadas de hidratos de carbono y proteína.
Si estás invitado a una fiesta o en tu casa hay un pozole tradicional y otros tentadores antojitos para celebrar, puedes apoyarse en modernos fármacos como orlistat (Andanza por su nombre comercial) que, mediante su innovador mecanismo de acción, auxilia y ayuda a eliminar de forma eficaz y efectiva hasta el 30% de la grasa ingerida con los alimentos.
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